El peruano David Nostas es el buscador de personas más famoso de Latinoamérica. Desde hace 20 años está dedicado a seguir el rastro de los desaparecidos. Ha logrado 30 mil reencuentros como el de una madre y un hijo que dejaron de verse 75 años, recibe a diario entre 20 y 40 llamadas y en su página de Facebook –con más de 240 mil seguidores– están pendientes por responder 8.000 mensajes. Perú, México –por causa del narcotráfico– y Colombia están entre los países que más solicitan su ayuda.
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David, economista de profesión y con 57 años, es la mezcla perfecta entre un periodista y un investigador. Es silencioso, cauteloso y efectivo. Gracias a Internet su trabajo no tiene límites. “No hay países lejanos, la distancia se ha convertido en un estado mental”.
Su historia inició con la popularización del teléfono en los años noventa. Era propietario de una empresa llamada Fonodato, dedicada a brindar todo tipo de información a través del teléfono y ubicar a los deudores morosos. Pero un día recibió un reto del hombre que le hacía la publicidad a su compañía.
“Me preguntó si podía encontrar a cualquier persona y le respondí que sí. Él tenía una hermana que no veía hace muchos años y le prometí que lo iba a ayudar. De ahí resultó un encuentro, me gustó y quedé enganchado. Ya son 20 años”, dice.
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Poco a poco David se vinculó a los medios de comunicación. Se hizo famoso en varios programas de televisión y radio. Sus casos también llegaron a la prensa. Fue así como se empezó a difundir que él prestaba el servicio de búsqueda de personas. Todo se masificó y en algunos momentos era imposible de controlar.
“La gente pensaba que estaba loco, pero no sólo los extraños sino también mi familia”. De su bolsillo alcanzó a gastar 300 mil dólares para pagar gastos operativos y viajes. Importaba licores y tenía un negocio próspero y rentable que le permitió encontrar a esos papás, hijos y hermanos desaparecidos. En la actualidad se sostiene económicamente gracias a algunos casos privados y de algunos canales de televisión que pagan por sus piezas periodísticas.
Su trabajo se ha visto beneficiado por los avances de la tecnología. Durante los primero años sus principales herramientas de trabajo eran los directorios telefónicos y documentos que debía solicitar directamente en oficinas oficiales.
[youtube width="549" height="366"]https://www.youtube.com/watch?v=eAlpbD3JEHk[/youtube]
“Antes era complicado incluso porque el teléfono no estaba masificado y muy pocas personas tenían. Era caro y no había tanta infraestructura para que todos tuvieran su teléfono. Muchas veces tenía que viajar a los puntos a buscar a las personas en diferentes comunidades y lugares muy pobres porque los ricos no se pierden”.
A través de su experiencia David aprendió que los factores relacionados a este fenómeno son la pobreza, la migración, hijos dados en adopción y hombres que abandonan a sus hijos. Precisa además que para él los ricos no se pierden porque éstos por lo general tienen una casa, un teléfono, propiedades y están registrados en distintas bases de datos.
Entre sus memorias tiene un caso que parece una novela. David simplemente lo define como una historia muy complicada. Recuerda que una mujer peruana le escribió de los Estados Unidos buscando a sus papás biológicos. Ella sólo tenía los nombres y apellidos de ambos.
“Encontré al papá, lo entrevisté y me dijo que sí, que tuvo una hija y la dio a otra familia. Me pongo a conversar con él y hablo con las hijas, quienes no tuvieron una buena actitud. La esposa del hombre se hace la muy sorprendida y le reclama al esposo. Al final la cosa fue avanzando y la mujer, de 50 años que buscaba a sus papás, pide una prueba de ADN al padre y a su esposa. Resulta que no era el padre. La mujer que se hacía la sorprendida era la madre biológica. La mujer se metió con otro hombre estando casada. Tal vez el hombre le dijo: ‘Acepto esto pero a la niña no’”.
A David su labor le ha traído enormes satisfacciones personales pero también admite que esta responsabilidad se ha comido su vida. “Prácticamente mi vida personal ha quedado de lado porque el éxito de todo esto es el empeño que le he puesto. Tipo ‘El Principito’: la rosa no es importante por ser rosa sino por el tiempo que le das. Los últimos 20 años de mi vida han sido para esto. En un reportaje que me hicieron le pedí perdón a mi hijo, de 24 años, por el tiempo. Mi vida la dediqué a esto. En cuerpo y alma”.
[youtube width="549" height="366"]https://www.youtube.com/watch?v=jivTvl7rSX8[/youtube]
Su historia inició con la popularización del teléfono en los años noventa. Era propietario de una empresa llamada Fonodato, dedicada a brindar todo tipo de información a través del teléfono y ubicar a los deudores morosos. Pero un día recibió un reto del hombre que le hacía la publicidad a su compañía.
“Me preguntó si podía encontrar a cualquier persona y le respondí que sí. Él tenía una hermana que no veía hace muchos años y le prometí que lo iba a ayudar. De ahí resultó un encuentro, me gustó y quedé enganchado. Ya son 20 años”, dice.
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Poco a poco David se vinculó a los medios de comunicación. Se hizo famoso en varios programas de televisión y radio. Sus casos también llegaron a la prensa. Fue así como se empezó a difundir que él prestaba el servicio de búsqueda de personas. Todo se masificó y en algunos momentos era imposible de controlar.
“La gente pensaba que estaba loco, pero no sólo los extraños sino también mi familia”. De su bolsillo alcanzó a gastar 300 mil dólares para pagar gastos operativos y viajes. Importaba licores y tenía un negocio próspero y rentable que le permitió encontrar a esos papás, hijos y hermanos desaparecidos. En la actualidad se sostiene económicamente gracias a algunos casos privados y de algunos canales de televisión que pagan por sus piezas periodísticas.
Su trabajo se ha visto beneficiado por los avances de la tecnología. Durante los primero años sus principales herramientas de trabajo eran los directorios telefónicos y documentos que debía solicitar directamente en oficinas oficiales.
[youtube width="549" height="366"]https://www.youtube.com/watch?v=eAlpbD3JEHk[/youtube]
“Antes era complicado incluso porque el teléfono no estaba masificado y muy pocas personas tenían. Era caro y no había tanta infraestructura para que todos tuvieran su teléfono. Muchas veces tenía que viajar a los puntos a buscar a las personas en diferentes comunidades y lugares muy pobres porque los ricos no se pierden”.
A través de su experiencia David aprendió que los factores relacionados a este fenómeno son la pobreza, la migración, hijos dados en adopción y hombres que abandonan a sus hijos. Precisa además que para él los ricos no se pierden porque éstos por lo general tienen una casa, un teléfono, propiedades y están registrados en distintas bases de datos.
Entre sus memorias tiene un caso que parece una novela. David simplemente lo define como una historia muy complicada. Recuerda que una mujer peruana le escribió de los Estados Unidos buscando a sus papás biológicos. Ella sólo tenía los nombres y apellidos de ambos.
“Encontré al papá, lo entrevisté y me dijo que sí, que tuvo una hija y la dio a otra familia. Me pongo a conversar con él y hablo con las hijas, quienes no tuvieron una buena actitud. La esposa del hombre se hace la muy sorprendida y le reclama al esposo. Al final la cosa fue avanzando y la mujer, de 50 años que buscaba a sus papás, pide una prueba de ADN al padre y a su esposa. Resulta que no era el padre. La mujer que se hacía la sorprendida era la madre biológica. La mujer se metió con otro hombre estando casada. Tal vez el hombre le dijo: ‘Acepto esto pero a la niña no’”.
A David su labor le ha traído enormes satisfacciones personales pero también admite que esta responsabilidad se ha comido su vida. “Prácticamente mi vida personal ha quedado de lado porque el éxito de todo esto es el empeño que le he puesto. Tipo ‘El Principito’: la rosa no es importante por ser rosa sino por el tiempo que le das. Los últimos 20 años de mi vida han sido para esto. En un reportaje que me hicieron le pedí perdón a mi hijo, de 24 años, por el tiempo. Mi vida la dediqué a esto. En cuerpo y alma”.
[youtube width="549" height="366"]https://www.youtube.com/watch?v=jivTvl7rSX8[/youtube]
