Los ex idiotas

No son sorpresivas las declaraciones del Presidente Juan Manuel Santos cuando afirma que “hay evidencia que las Farc financiaban una parte de las movilizaciones de protestas sociales”, tal como lo confirma un email del bandido Jojoy dirigido a sus secuaces: “Camaradas del Secretariado. Saludo revolucionario [Julio 1 2010] Primero: les sugiero hacer llegar urgente a Bogotá 200 mil dólares del dinero que el Embo destinó para lo del 20 de Julio en Bogotá, que está en manos de Carlos Antonio [Lozada]. Los que se entregarían en la capital a los que dice Iván. Con eso cubre comida y otros gastos. [Segundo] Lo que nos informa Iván era alimentación, los gastos son astronómicos para nuestras raquíticas finanzas, pero nos toca disponer de recursos. Se hace necesario que ya diga cada bloque y comando conjunto de las Farc-EP cuánto aporta. Cada bloque aporta a cada manifestación. [Tercero]...: aportes. Bloque Oriental: 400 millones de pesos. Sur: 300 millones. Magdalena Medio: 200 millones. Bloque Iván Ríos: 100 millones. Bloque Caribe: 50 millones. Bloque Móvil: 200 millones. Comando Conjunto Occidental: 200 millones. CCC: 100 millones. Para un total general de 1.550 millones de pesos. Ese dinero lo ponemos en manos de Iván, y él nos pasa las cuentas. Lo que nos queda lo dejamos como reserva para los gastos que tenemos que seguir haciendo con base a lo que salga para el futuro del evento del Bicentenario. Si falta nos toca agrandar los aportes. Esto es fuera de los actos que se hacen por bloques y comandos conjuntos [firma Jorge]”. Secreto a voces que en buena hora se está documentando más y más. Vale la pena recordar las “Marchas campesinas” de hace unos pocos años, donde miles de humildes colombianos eran obligados a caminar y bloquear carreteras por semanas enteras. ¿Cómo se financiaba la logística, las comidas, las carpas, el agua, los pañales de los bebés? ¿Quién ha pagado los costos de las más recientes marchas indígenas? Blanco es. Algunos personajes a los que llamábamos idiotas útiles son los agentes diplomáticos del terrorismo. La diferencia es que ahora nos damos cuenta de que son útiles, pero no tan idiotas, porque efectivamente están a sueldo. Sindicatos tomados por la guerrilla como Sintrainal, el sindicato de los trabajadores de Coca Cola en una planta de envase en Urabá, han acusado durante años a la multinacional de haber matado tres sindicalistas. Este cliché se ha convertido en el caballito de algunas ONG que han pretendido bloquear la venta de Coca Cola en algunas universidades en Estados Unidos e ¡Irlanda! ¿Por qué Irlanda? Pues por el vínculo Farc-IRA.  Gallina lo pone. Este grupo de ex idiotas protesta año tras año en las Asambleas de Accionistas de Coca Cola a las que tienen derecho a entrar porque han comprado unas pocas acciones. Son unos veinte gatos que se meten a hacer bulla, al punto que han impactado el valor de la acción en ocasiones. Incluso se dice que sólo dos factores han contribuido a movimientos bruscos en el precio de la acción: el cambio de sabor de la bebida que fue un fracaso hace unos pocos años, y las protestas de estos saboteadores, de los cuales ninguno es colombiano. Los ex idiotas creen, como sus jefes, en “todas las formas de lucha”. Los guerrillos en Urabá trataron de hacerles pagar vacuna. Al no lograrlo han intentado repetidamente demandar a Coca Cola en Cortes Norteamericanas, demandas que no han sido aceptadas por difusas y falta de jurisdicción. Esta misma pantomima se ha pretendido armar en torno a la carbonera Drummond, donde los ex idiotas acusan a directivos de la compañía de mandar a asesinar a tres sindicalistas en 2001. La guerrilla ha utilizado a las familias para que demanden repetidamente a la compañía en Estados Unidos: 2003, 2007 y 2009, sin ningún resultado hasta ahora por falta de claridad en las pruebas y por jurisdicción. Pero tanta ha sido la joda que ahora Drummond está en venta y sus dueños no quieren saber nada de Colombia. Huevo se llama. Ahora el caballito de batalla son las ONG´s “ambientalistas”, que con el argumento de la depredación del páramo, están armando la batalla contra las grandes mineras de oro que si cumplen con todos los estándares internacionales puesto que están inscritas en Bolsa (Toronto, New York), y este es un requisito ineludible para poder abrir la compañía al público. ¿Y qué dicen estas nuevas organizaciones de fachada de la guerrilla sobre la minería ilegal que es la que realmente depreda y contamina? Absolutamente nada. ¿Será que los Ministerios de Minas y Ambiente se comen este cuento convirtiéndose, ellos si, en idiotas útiles? Ojalá se acuerden de que la única idiota útil que realmente queda se llama Tanja y es holandesa. Frito se come.