Más de 200 niños de Tarazá y Carepa (Antioquia) participaron el fin de semana en una campaña que propone la práctica del deporte como método para prevenir su reclutamiento por parte de grupos armados ilegales o bandas criminales.
La actividad, realizada por el Ministerio de Defesa y la Séptima División del Ejército, comenzó desde la semana pasada con el torneo “Juega por la Vida”, en la que los menores compitieron en partidos de fútbol por una batalla deportiva, en rechazo a las actividades bélicas.
“En este Bajo Cauca la niñez está muy perdida sobre todo en los vicios. Eso está bajo la responsabilidad de nosotros los padres que los dejamos hacer lo que les da la gana, no les ponemos contención. El mensaje es a todos los padres que estén pendientes de sus hijos y que mejor los apoyen en el deporte”, manifestó William Montoya, padre de uno de los menores participantes.
Durante los partidos de microfútbol y las actividades culturales, los niños fueron capacitados en los riesgos que a su edad se tiene por vivir cerca a brotes de grupos ilegales.
La Séptima División aprovechó para informar que en lo que va corrido del año han conseguido 128 desmovilizaciones, 21 de ellos de menores de edad.
“El deporte y la Cultura una herramienta poderosa para alejar los niños, niñas y adolescencia de la violencia y las armas, una alternativa para emplear el tiempo libre en actividades sanas que aporten a la formación y crecimiento personal”, sostuvieron voceros de las fuerzas militares durante las actividades que se realizaron por cinco días.
