Atlético Nacional tenía una cuenta pendiente a nivel internacional y una última oportunidad para saldarla. En Argentina ante Newells Old Boys, la sensación de los últimos años del fútbol gaucho, el campeón colombiano fue a todo o nada por una clasificación que limpiara el honor del fútbol nacional y ¡Vaya si quedó brillante!
Al comienzo del partido hubo una mancha. A los cinco minutos, Edwin Cardona se vio inmerso en un borbollón contra los jugadores de Newells y el juez Arias de Paraguay, ni corto ni perezoso, lo echó al jugador verdolaga junto al argentino Víctor López. Nacional no tuvo tiempo de saber cómo le afectaría la expulsión del mejor jugador del semestre porque dos más tarde Santiago Trellez presionó la salida del arquero Guzmán consiguiendo el error de este y dándole la ventaja al equipo paisa.
Fue a la visita a quien le sentó mejor el panorama de jugar con diez hombres y se hizo dueño del partido. Sin Cardona como acompañante, creció la figura de Sherman Cárdenas que se transformó en conductor, armador y definidor de jugadas, culminando una contra empezada por Trellez, que tuvo aduana en Juan David Valencia y que el petizo jugador santandereano transformó en el 2-0.
Nacional era una maquina imparable sin fisuras hasta que Bocanegra perdió la espalda y el lateral izquierdo del conjunto rosarino, Milton Casco, convirtió el descuento y puso el dramatismo a flor de piel. El partido entró en una meseta que favorecía las intenciones del conjunto ganador que aplacó a un Newells muy inofensivo. En esa tranquilidad, el encuentro se fue a su segunda etapa.
Puntos altos en Nacional como Cárdenas, Alexander Mejía, Juan David Valencia, Stefan Medina y Santiago Trellez, que sorpresivamente dejó el terreno en el medio tiempo en virtud de Orlando Berrio, que no iba a fallar. Las triangulaciones verdolagas consiguieron poner cara a cara al recién ingresado ante un apresurado arquero Guzmán que salió mal y fue humillado por el delantero que pasó el balón por encima y anotó el 3-1.
A pesar del empuje de Newells, el dueño del partido era Nacional que en cada contra desdibujaba más a un rival desahuciado. Berrio pudo culminar todo en goleada, pero los defensores y la mala puntería lo evitaron. Con un estadio que entre lágrimas despidió a su Newells querido, Atlético Nacional fue aplaudido luego de la exhibición que saca la cara por el país y que deja a Colombia con esperanza de ganar la Copa Libertadores, esperanza color Verde.
