Desde el ‘Foro de mandatarios progresistas’ en la ciudad de Bruselas, capital de Bélgica, el presidente Gustavo Petro aprovechó su intervención para darle un jalón de orejas al progresismo mundial por caer en lo que llamó una “imitación de la derecha”. No solo de sus discursos, sino también de sus estrategias y tácticas.
De acuerdo con el presidente Petro, la senda del camino del progresismo nacido en Francia “no lo estamos haciendo realidad”, refiriéndose a los mandatarios mundiales que cargan estas banderas pero que a su visión no las representan en su forma de gobernar. De hecho, dio varios ejemplos que para él dejan en evidencia esta problemática.
“Uno de los hechos que más se le critica a lo que podríamos llamar una posición progresista, con toda su diversidad interna, es que imite a la derecha. Que tome posiciones que tienen que ver con el relato de la derecha y por tanto le niega a la sociedad que está en un mundo oscuro, crítico, ver alternativas. De alumbrar el faro”, fue la frase inicial del discurso del presidente Gustavo Petro.
El primer ejemplo que trajo a colación el mandatario colombiano fue la migración, frente a la cual precisó que la posición de la derecha suele ser “llenar de campos de concentración, dejar ahogar, matar, poner un muro al éxodo que produce el mundo del poder”. Tácticas que califica como completamente contrarias al progresismo, que según él debería estar más encaminado a procurar la “prosperidad social” en el origen de la migración.
El segundo punto abordado tuvo que ver con la crisis climática y señaló como repudiable que el negacionismo pueda llegar a la izquierda mundial. “¿Creemos realmente que el mercado actuando libremente va a hacer transitar la economía hacia una economía descarbonizada? (...) Creo que ninguna de nuestras tradiciones políticas, nuestras lecturas, nuestras concepciones, nos dirían eso”, señaló.
Finalmente, el presidente Petro recalcó que la guerra es otro de los temas en los que el progresismo mundial está fallando al parecerse a la derecha. Asegura que mientras ellos creen que es un instrumento de solución, el progresismo debería “construir espacios muy difíciles de diálogo para acabar la guerra en cualquier parte del mundo”.
“La misma Colombia es una experiencia en ese sentido”, precisó.
Finalmente, el mandatario dijo que el progresismo no debe simplemente proponer posiciones y acciones diferentes frente a las materias que envuelven la política pública, sino además llevar esas narrativas a los hechos. No quedarse en discurso.
