En el mundo de las apuestas existe la delgada línea entre la diversión, el derroche y la estupidez. Varias de las personas que salen en esta lista probablemente cayeron en desgracia por su locura, falta de ingenio o desatino a la hora de jugar.
Estos son los jugadores dispuestos a apostar cualquier cosa, incluso sin muchas oportunidades de victoria y con desastrosos resultados en la mayoría de casos. No dude leer ¡Las apuestas más raras del mundo!
En una apuesta perdió y le tocó ponerse un larguísimo nombre.
Un hombre de Nueva Zelanda tuvo que cambiar su nombre por uno de 99 letras, "Full Metal Havok More Sexy N Intelligent Than Spock And All The Superheroes Combined With Frostnova", luego de perder una apuesta en un juego de póker.
El nombre tiene una letra menos que el límite permitido por el Departamento del interior del país. El nombre fue elegido en un foro en línea por todos sus compañeros en el juego de las cartas. El mejor amigo del perdedor le dijo a Telegraph: "Mi amigo perdió una apuesta hace cinco años y cambió su nombre.Se acaba de enterar de lo que realmente fue aceptada la semana pasada cuando su pasaporte caducado."
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Un hombre de Illinois, Estados Unidos, le pegó tres corrientazos a su mujer luego de ganar una apuesta en un partido de fútbol americano. En un juego de los Bears VS. Packers, John Grant, de 42 años, un fanático de los Bears, y su esposa Nicole, partidaria de los Packers, decidieron hacer algo inimaginable en un bar de Wisconsin.
Le dio choques eléctricos a su esposa al ganar una apuesta
Estuvieron de acuerdo en apostar que dependiendo del equipo que ganara, se permitiría que el vencedor diera un choque eléctrico con un arma al perdedor. Cuando los osos ganaron 27-20 la pareja salió del bar y Nicole se inclinó contra la pared para recibir su castigo.
El Dailymail dice que mientras la mujer comenzó riendo por haber perdido la apuesta, la situación se complicó después del primer corrientazo cuando se desplomó al suelo, protegiéndose con un amigo por el dolor recibido.
Ajeno a su sufrimiento, Grant le propinó a su mujer el segundo corrientazo, esta vez en el muslo. Decidiendo que ya había tenido suficiente, Nicole llamó a la policía poco después de la medianoche. A John lo arrestaron por posesión de una pistola Taser, que es ilegal sino hay licencia en Wisconsin.
Apostó todo lo que tenía.¿Ganó?
En julio de 2012 un hombre tuvo que ser hospitalizado luego de que sus amigos le prendieran fuego a su cabeza en una apuesta realizada en un bar local.
El Dailymail informó inicialmente que William Bonner, de 36 años de edad, se metió en una pelea con varios clientes en Augusta, y luego tuvo su rostro quemado en represalia por lo acontecido.
Sin embargo, un video de vigilancia desde el interior del bar, reveló que Bonner le había dicho a sus compañeros de copas que le rociaran la cabeza con alcohol. [youtube width="549" height="366"]http://www.youtube.com/watch?v=NRnVSX1OVn4[/youtube] El hombre que apostó a su esposa y...perdió
Andrei Karpov es un ruso que tuvo la anómala intención de poner a su esposa en juego apostando al póker. Y no solo perdió, Tatiana decidió divorcirse de él y se casó con Sergey Brodov, el hombre que se ganó el premio.
"Fue humillante y yo estaba completamente avergonzada", dijo Tatiana, quien no sabía nada de lo que había pasado hasta que Brodov se presentó en su casa para recoger sus ganancias.
"Pero en cuanto a mi ex marido hizo eso, yo sabía que tenía que dejarlo. Sergey era un hombre muy guapo, encantador, y estoy muy contenta con él, aunque me haya ganado en un juego de póker", le dijo esta mujer al diario The Seattle Times.
Tuvo que ponerse implantes de seno por una apuesta perdida, y es hombre
Un hombre que tiene implantes de mama desde hace 17 años, confesó que los ama demasiado como para deshacerse de ellos.
Brian Zembic se ganó más de $200 millones de pesos cuando accedió a pasar por el quirófano para una cirugía estética en 1996. Bajo los términos de la apuesta original, también se acordó que Brian se quedara con $13 millones por cada año adicional que tenga sus implantes.
Y se adaptó tan bien a sus nuevos senos que el hombre que está atrapado con su nuevo aspecto, no quiere quitárselos. "No quiero que empiecen a ser flacidos tan rápido, porque van a tener un aspecto repugnante", le dijo el hombre de 51 años de edad al diario Mirror.
Fuentes consultadas: Mirror, The Seattle Times, Dailymail, Oddee, onlinepokerrealmoney.com, Telegraph
