Critican a Lego por rostros violentos de sus muñecos

Publicado por: admin el Dom, 16/06/2013 - 06:01
Las caras amables y sonrientes de los muñecos de Lego parecen ser cosa del pasado. Poco a poco van desapareciendo los doctores cordiales que atienden pacientes felices para ser remplazados por person
Las caras amables y sonrientes de los muñecos de Lego parecen ser cosa del pasado. Poco a poco van desapareciendo los doctores cordiales que atienden pacientes felices para ser remplazados por personajes de ceño fruncido, haciendo cara de Rambo. Así lo comprobó un estudio de la universidad neozelandesa de Canterbury, que constató que esta transición comenzó en los años  90. A la expresión de felicidad, que en un comienzo era el único sentimiento de los personajes de Lego, se le han sumado las caras de rabia, tristeza, sorpresa y miedo. En el estudio fueron analizados 3.655 figuras producidas entre 1975 y 2010. La evolución de las expresiones permite concluir que el fabricante decidió moverse hacia el tema bélico en sus personajes. Este cambio en el tradicional juguete infantil siembra, obviamente, la preocupación de cómo puede influir en los niños la negatividad de los muñecos. "Es importante crear expresiones apropiadas y estudiar cómo esas expresiones son recibidas por los usuarios. Las expresiones de los muñecos pueden tener un importante impacto entre los niños", opina el doctor Christoph Bartneck, director de la investigación, quien presentará todas las conclusiones de su estudio en la Primera Conferencia Internacional sobre Interacción Humano-Agente, que tendrá lugar en Sapporo, Japón. Lego dio su respuesta a los hallazgos de la investigación. Su gerente de comunicaciones, Roar Rude Trangbæk, dijo que cada juguete fabricado por la empresa pasa tests con niños diversos y que también son consultados siquiatras, maestros y padres de familia. Agregó que investigaciones realizadas por Lego demostraron que los niños hombres, principalmente, disfrutan jugar creando conflictos entre sus muñecos. "El conflicto entre el bueno y el malo no es nada nuevo, dijo Trangbæk, y al final siempre gana el bueno". Agregó que si las caras rudas preocupan a los padres, simplemente pueden cambiar el rostro grave por uno feliz.