Algunas poblaciones en Europa, China y Estados Unidos han decidido reducir la dependencia de sus habitantes a los vehículos que funcionan con combustibles contaminantes. En cambio han optimizado sistemas de transporte masivo basados en energía eléctrica, y además implementan la cultura del uso de bicicletas como método saludable de transporte. Lograrlo no ha sido fácil, y los gobernantes que implementan este modelo de ciudad se enfrentan a poderosas críticas que impiden la ágil realización de sus planes. Sin embargo, los avances en varias de las siguientes ciudades son notorios y tomados como ejemplo en cada país.
Friburgo (Alemania)
La ciudad tiene 219 mil habitantes y es uno de los centros urbanos más poblados del sur de Alemania. Es considerada la capital ecológica del país y el título no es gratuito. En la zona histórica y céntrica de Friburgo hay una expresa prohibición al tránsito vehicular. Poco a poco el espacio para los peatones va aumentando gracias a un sistema de transporte público basado en una red férrea alimentada por trenes y buses eléctricos. En el resto de ciudad también se ha reducido el uso de automóviles y gran parte de la energía que abastece los hogares es de fuente solar.
Ginebra (Suiza)
En la segunda ciudad más poblada del país, la lucha por liberar de carros sus calles se ha librado en el Concejo Municipal. Desde 2010 el Partido Verde, apoyado por los socialdemócratas y legisladores de centro, ha defendido una ley para impedir el tráfico vehicular de forma permanente en 200 calles. Hasta ahora han avanzado en el cierre de 10% de lo pactado. El plan tiene plazos de cumplimiento hasta el 2014. Además, tienen frecuentes “días sin carro” que son propuestos como iniciativa ciudadana.
Davis (California – Estados Unidos)
Davis es considerada cuna de ciclistas. Su sistema de transporte ha evolucionado para prescindir paulatinamente de los carros. Desde 1960 ha sido política gubernamental de Davis la implementación de vías para el transporte ecológico. Existe una completa red de carreteras para bicicletas, centros seguros de estacionamientos y alquiler de estos vehículos. El sistema es aprovechado principalmente por población universitaria.
París (Francia)
La ciudad está en batalla por despejar varios de sus caminos del imperio de vehículos motorizados. Bertrand Delanoë, alcalde de París, ha iniciado una cruzada por eliminar gradualmente las bahías de estacionamiento público de carros. Además ha implementado desincentivos, como elevados costos de parqueaderos y combustibles. Entre sus más fuertes batallas, el mandatario se enfocó en reconquistar las vías que delinean al rìo Sena, a pesar de la oposición de políticos de derecha. Con una campaña denominada “ París respira”, Delanoë ha logrado recuperar la peatonalización de la autopista de las laderas del Sena, que son transitables solo por peatones los fines de semana y días festivos entre las 9 de la mañana y las 6 de la tarde.
Malmö (Suecia)
La ciudad nórdica tiene un modelo de transporte basado en bicicletas y tren. Existen más de 400 kilómetros de ciclo-vías para el disfrute de 280 mil habitantes. También hay más bahías para parquear bicicletas que para automóviles. Son estacionamientos gratuitos que muchas veces tienen centros de servicio técnico en caso de ser necesario un mantenimiento a los neumáticos u otras reparaciones. Es más, en varios puntos de la ciudad hay duchas y casilleros para el cambio de ropa después del ejercicio.
Guangzhou (China)
La ciudad estaba cansada de la contaminación, pero la contienda para evitar el uso del carro particular a los 12 millones de habitantes que hay no parece nada fácil. Sin embargo, las medidas paulatinas son importantes avances. En primer lugar las autoridades han incrementado la infraestructura del metro, para que sea capaz de abastecer con agilidad la demanda de transporte, elevando el tráfico a 23 mil pasajeros por hora. También hay una ofensiva declarada a la compra de autos nuevos, restringiendo el número de matrículas disponibles para carros.
Alpes Suizos
Los poblados de Zermatt, Bettmeralp, Braunwald, Riederalp y Saas-Fee Stoos son comunidades, entre mil y 10 mil habitantes, que han evitado hasta donde ha sido posible el uso de transporte basado en combustible fósil. Existen trenes, bicicletas y pequeños vehículos eléctricos como modo de movilización y carreteras rústicas para desincentivar el tráfico de carros.
Louvain-la-Neuve (Bélgica)
Es una comunidad planificada como ciudadela universitaria que tiene unos 29 mil habitantes, y cuyo centro urbano ha sido construido sobre hormigón para soportar en su superficie a edificios y calles exclusivamente peatonales, y bajo tierra vías férreas y carreteras para automóviles. Sin embargo, el uso de carros es mínimo.
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Sáb, 09/02/2013 - 07:00
Algunas poblaciones en Europa, China y Estados Unidos han decidido reducir la dependencia de sus habitantes a los vehículos que funcionan con combustibles contaminantes. En cambio han optimizado sist