–Mira Yadi, la gata está poniendo quejas porque no le limpiaste la arenera ayer. Dice que no se la lavaste, no se la estás moviendo y que está muy bajita. Y la vieja (una perra de 15 años) dice que la hiciste correr cuando la sacaste –le dijo Xiomara Rodríguez a su empleada del servicio.
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La mujer abrió los ojos, comenzó a temblar y le justificó varias cosas. Xiomara no recuerda si le había contado sobre su particular trabajo: hablar con los animales. Pero la empleada al día siguiente no volvió a trabajar pese a que se le debía dinero de su sueldo.
En los últimos años Xiomara se ha dedicado a comunicarse con perros, gatos, caballos, guacamayos, tortugas y delfines para saber qué sienten, les gusta, si son felices y ayudarlos en momentos difíciles como es acudir a una eutanasia. Su misión es tratar de unir dos mundos, mejorar la comunicación y ayudar a entenderlos.
“Es importante saber lo que piensan. Más por saber lo que sienten. No todos necesitan lo mismo, no todos quieren lo mismo. Por ejemplo, hay muchos perros de la calle que nos les llama la atención estar en una casa, hay otros que no se sienten cómodos en sus casas. En términos generales sí se adaptan y sí son felices. Pero muchas veces no están para estar con esa familia”, dice Xiomara.
KienyKe.com grabó un fragmento de una consulta. Lina Aleán llevó a su perro Bruno, de un año de edad, para conocer sus pensamientos. El resultado fue impresionante. Días después conversamos con la mamá de Bruno y estaba sorprendida. Calificó el trabajo de Xiomara como certero e increíble.
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Desde niña, Xiomara ha tenido el don de comunicarse con los animales a través de la telepatía y percibir físicamente lo que ellos sienten. Sin embrago, no era consciente de la particularidad de la condición porque la creía normal. Pero a los 20 años confrontó esas voces que había escuchado durante toda su vida.
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Mientras estaba en una tapicería de Bogotá junto a su mamá un perro le dijo: “Por favor ayúdame, me estoy portando mal y me van a regalar”. Xiomara no lo podía creer y no entendía lo que sucedía hasta que la propietaria del almacén le confirmó que quería regalar ese perro porque perseguía a las bicicletas. Su única reacción fue huir del lugar.
Con el tiempo llegó la aceptación y contarle a la gente su don, el mismo que tienen cerca de 200 personas en todo el mundo. “Es como magia, un don. No sé cómo enseñarlo. Ha sido un proceso de crecimiento personal y espiritual. Cada día hay más habilidades. El objetivo es mejorar la comunicación entre esos dos mundos, generar sensibilidad”.
Las preguntas que más le hacen las personas a sus mascotas son: ¿Es feliz? ¿Le gusta la comida? Y ¿le gustan los paseos y las salidas? Una consulta con Xiomara está entre los 150 y 250 mil pesos. El precio varía según el tamaño de las mascotas y el lugar del país. Aunque, gracias a la tecnología, también se hacen consultas a través de Skype o una fotografía.
Las consultas de urgencia también hacen parte de su especialidad. Los dueños de las mascotas suelen acudir a sus servicios cuando se trata de la eutanasia. En estos casos, Xiomara se ha encontrado con mascotas que piden que los dejen ir pronto o que les den unos días más de vida. Otros han pedido un suculento plato de comida antes de morir.
“Cada consulta es una experiencia maravillosa. Puedo reír sin parar o puedo llorar mis ojos. Hay unas que son maravillosas porque ponen quejas, cuentan que son felices. Otros aprovechan y les dicen a sus dueños que no les gusta que le recojan el pelo. También hay historias muy tristes. Por ejemplo, que fueron abandonados o han sido abusados física o sexualmente. Hay de todo. Todas las consultas las veo como algo positivo así sean dolorosas. Cada peludo me deja una enseñanza, una lección de vida. Me encanta porque son unos sapos de miedo”.
Frente a su trabajo no han faltado las críticas. “Siempre va a existir gente que opina y critica porque es algo difícil de entender, difícil de aceptar. Me duele que hablen mal, juzguen. Me gusta más que la gente sea sincera. Siempre llega gente incrédula a la consulta, después me lo confiesan y al final dicen: ¡wow, es verdad! Y la gente que sale de consulta siempre resulta satisfecha”.
La colombiana que habla con los animales
Mar, 09/06/2015 - 14:04
–Mira Yadi, la gata está poniendo quejas porque no le limpiaste la arenera ayer. Dice que no se la lavaste, no se la estás moviendo y que está muy bajita. Y la vieja (una perra de 15 años) dice