Hasta hace poco, el matrimonio de Carlos Cárdenas y María del Pilar Gómez era uno más de los tantos que madrugan cada día a conseguir los recursos para el sustento diario y la educación de sus hijos. Cárdenas es propietario de un próspero negocio conocido como Acoples Cárdenas, situado en la calle 13 con carrera 33, en pleno centro de Bogotá. Su esposa, a juzgar por los primeros indicios, es una administradora que ayuda en las labores empresariales de su familia.
Pero hoy su vida les cambió radicalmente. María del Pilar fue capturada por la Fiscalía el jueves anterior bajo el presunto delito de obstrucción a la justicia. Ella es la mamá de Carlos Cárdenas, un joven de apenas 22 años de edad, estudiante de ingeniería industrial de la Universidad de Los Andes, quien al parecer conoce la verdad del presunto homicidio de su compañero Luis Colmenares, ocurrido en la madrugada del 31 de octubre de 2010. Él no ha sido vinculado formalmente a la investigación.
Luego de la captura de María del Pilar se empezaron a tejer todo tipo de especulaciones. Lo cierto es que la Fiscalía, que este viernes presentó el escrito de imputación de los cargos, tiene evidencias de que María del Pilar y la abogada Aidé Acevedo habrían hecho causa común para desviar aspectos del crimen en el que estaría involucrado su hijo.
La mamá de Carlos fue capturada por la Fiscalía. Laura también se encuentra detenida.
La Fiscalía tiene en sus manos al menos 20 grabaciones de interceptaciones telefónicas que, al parecer, no dejan dudas de maniobras ilícitas para cambiar el rumbo de la investigación. Según conoció Kien&Ke, en las grabaciones también aparece mencionado un alto funcionario de la Fiscalía que se habría prestado para estas actividades. Esa sería la causa por la cual el ente acusador, con la anuencia de un juez, capturó a estas dos mujeres que hoy aguantan el peso de los señalamientos. Según las pruebas, la abogada Aidé Acevedo hizo gestiones ante el Director Nacional de Fiscalías, Néstor Armando Novoa, para que removieran al fiscal 11 Seccional de Vida, Antonio Luis González, que lleva la investigación. La idea era que su reemplazo la archivara y no se conocieran los detalles del presunto homicidio.
La muerte de Colmenares ha despertado la curiosidad nacional porque ahora aparecieron evidencias de un posible asesinato que contrastan con versiones que indicaban que el joven, después de comer un perro caliente en la madrugada del 31 de octubre en compañía de su novia Laura Moreno y su amiga Jessy Quintero, había salido corriendo sin explicación para luego lanzarse al caño del parque El Virrey, donde habría muerto por el impacto de la caída.
Un juez decidirá si acepta las pruebas que tiene la Fiscalía contra María del Pilar Gómez.Un año después, la versión perdió credibilidad por los hallazgos de peritos privados, contratados por la familia de Colmenares, que indican que el joven de 21 años recibió golpes contundentes en su cráneo y otras partes del cuerpo y que además tenía evidencias de heridas de arma corto punzante.
El pasado 7 de octubre la Fiscalía capturó a Laura Moreno y a Jessy Quintero por considerar que su versión de los hechos es poco creíble. La investigación apunta a que se trató de un crimen pasional. Se sabe que muy pocos estaban de acuerdo con la relación sentimental de Laura y Luis. Las coincidencias no son pocas: Laura había mantenido un largo noviazgo con Carlos Cárdenas, el joven cuya mamá hoy se encuentra detenida por tratar de ocultar información sobre el posible crimen.
Hasta el año pasado, María del Pilar Gómez (der.) era la suegra de Laura Moreno. Hoy, ambas se encuentran detenidas.
Sin embargo, serán las grabaciones que tiene la Fiscalía de las conversaciones entre Laura y sus compañeros, así como los audios de la mamá de Carlos Cárdenas, las que terminen por desenredar el nudo de un crimen que tiene todos los matices de una novela policiaca. El viernes en la tarde, María del Pilar y la abogada Aidé se declararon inocentes de los cargos que le imputó la Fiscalía y ahora será el juez quien decida su suerte. Intervención del fiscal 11 Seccional de Vida, Antonio Luis González.