Discplina y convicción, dos palabras que tenía en su mente María Isabel Urrutia, quien desde muy joven tenía claro quién quería ser y a dónde quería llegar. Nació en el Valle, en una típica familia humilde y a corta edad se echó responsabilidades que pocos jóvenes asumen en esa etapa.
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Mientras otros disfrutaban de su juventud, ella entrenaba, trabajaba y estudiaba, lo tenía claro, quería llegar a Europa para tener un entrenamiento de alto rendimiento, ese que en la época de los 90 no era posible en Colombia.
Viajó y estuvo como beneficiaria de un convenio entre Coldeportes y el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de España, con el objetivo que se trazó desde siempre, competir y entrenar para representar a su país, así se lo contó al programa La Red de Caracol TV.
Fue difícil, lo recuerda, pero como cualquier guerrera lo cuenta con orgullo, esas son sus raíces, los principios y valores que le enseñaron en su hogar y que los puso en práctica en cada experiencia que vivió lejos de su familia y amigos. Pasó adversidades y según le contó al programa La red, le tocó dormir en las estaciones de metro de Francia y Alemania, pero no le importó y envuelta en un sleeping y con la colchoneta de estiramientos como base, se acostaba y despertaba a seguir trabajando por su objetivo .
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Hoy inspira a las nuevas generaciones a luchar por el deporte y prepararse con la disciplina que ha caracterizado a varios de los deportistas colombianos que han conseguido reconocimiento internacional como ella.
En el 2000 marcó historia, los medios de todo el mundo registraron el hecho. Era oro para Colombia, logró colgarse la medalla a sus 34 años, a pesar de haber enfrentando 11 meses antes de los Olímpicos una lesión en la rodilla que casi opaca su sueño.
Le abrió las puertas al deporte en el exterior, desde ese día Colombia retumbaba en la memoria de los grandes escenarios deportivos del mundo. Pasó por la política y gracias a su jerarquía llegó al Congreso para hablar por el deporte colombiano y aunque aún falta mucho por hacer, se siente satisfecha. Ahora retornó a sus orígenes y gracias a su experiencia le inyecta a sus alumnas su carácter y disciplina en la Liga levantamiento de pesas de Bogotá, donde la ven como un referente deportivo internacional.
