En pleno año 2012, donde estamos esperando con tanta ansiedad el final de los tiempos, y los miedos se han encargado de acompañar al hombre con una serie de imaginarios, creencias, reglas y acontecimientos (miedos particulares), el historiador francés Jean Delumeau lo defino como el hábito que se tiene, en un grupo humano, de temer a tal o cual amenaza (real o imaginaria). Desde la edad media, los miedos a los que mas se recurrían eran: al otro, al mar, al bosque, a los muertos, a la noche, al diablo y al fin del mundo. El miedo estaba en todas partes, lo tenía cada uno junto a si y ante si.
Las representaciones artísticas como El triunfo de la muerte de Pieter Brugel el viejo (1562); Juicio universal de Hans Memling (1467-1471); El juicio final de Miguel Ángel (1537-1541) y Juicio Final de Gregorio Vásquez de Arce y Ceballos; se han encargado de mostrar lo feo, bajo la forma de lo terrorífico y diabólico. Las representaciones del juicio final siempre van a estar ligadas a un marco religioso. Para el cristianismo, esta el Apocalipsis, para los musulmanes, el juicio final esta escrito en el Corán y para los hindúes, el cual no es claro, si muestra un juicio sobre los meritos de la vida del hombre que se reflejará en la reencarnación.
Sin ir mas lejos, las culturas mesoamericanas crearon todo un rico marco cultural, gastronomico, agrícola, intelectual, gnóstico y espiritual. Partiendo de ese conocimiento, datado aproximadamente desde el año 2000 a.C; se establece una fecha exacta del fin del mundo o de un cambio universal. Esta fecha se puede encontrar en el Monumento 6 de Tortugero en Tabasco, México. Los pensamientos que están relacionados con este tipo de predicciones, marcan en el inconsciente de las personas (entendido desde el psicoanálisis) como un sistema de impulsos reprimidos que se manifiestan en encontrar una guía mágica, espiritual o religiosa en busca de la salvación.
El arte contemporáneo no es ajeno a este tema. En el se puede encontrar una serie de iconografías e iconologías que van de la mano con la cotidianidad de la sociedad. Representaciones de un final de los tiempos, que para este caso no siempre esta relacionado con una temática religiosa, sino ambiental, social, económica, política entre otros temas, que afectan el medio en el que se habita. Toda la cultura visual contemporánea tiene su propio discurso significante.
A vísperas del fin del mundo, el Museo de Arte Contemporáneo en alianza con el Instituto Distrital de las Artes – IDARTES, ha convocado a los artistas de la ciudad en las categorías de Autodidactas (La pre-existencia humana), Estudiantes (Ars moriendi contemporáneo) y Titulados (Una tierra nueva), para que presentaran sus propuestas a partir de tres textos curatoriales sobre el antes, el durante y el después del fin del mundo.
[caption id="attachment_238564" align="aligncenter" width="367" caption="Verónica Giraldo Canal El espejo - the mirror"]
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[caption id="attachment_238566" align="aligncenter" width="237" caption="Ernesto Casas - Efectos de la luz urbana nocturna"]
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[caption id="attachment_238567" align="aligncenter" width="422" caption="Christian Cely Morales - A su salud"]
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[caption id="attachment_238568" align="aligncenter" width="584" caption="Luisa Pereira Castro - Incertidumbre"]
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[caption id="attachment_238570" align="aligncenter" width="298" caption="Rosabel Martínez Pinzón - ...Contigo"]
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[caption id="attachment_238571" align="aligncenter" width="393" caption="Colectivo Don Nadie"]
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