El único amigo “gamín” que tiene Juan Manuel Santos soy yo. Y esa amistad que nos une de vieja data, es el único lunar -a mucho honor- que puede encontrarse en la intachable hoja de vida del primer mandatario de la República. Por el contrario, en mi “hoja de muerte” -porque no de otra manera puede llamarse el curriculum vitae de un pobre diablo como yo- Santos lo es todo: mi padrino, mi única recomendación, mi palanca.
Juan Manuel tiene una razón para ser mi amigo: yo conozco la calle; el no tiene ni la más puta idea de lo que es eso. Está acostumbrado a ver y manejar el poder desde los salones y recintos, desde los clubes y los campos de golf, desde las mesas de junta directiva y las oficinas, desde los escritorios y los teléfonos. Por eso tiene la piel blanca y las uñas bien cuidadas. Y por eso cuando el movimiento estudiantil llegó a su clímax el jueves de la semana pasada, lo primero que hizo fue llamarme para que lo asesorara.
Y que me haiga llamado a mí es, en cierto sentido, un desplante para Angelino, que se supone fue escogido para ponerle pueblo y morcilla al gobierno Santos. Es que yo no aspiro a lanzar mi candidatura presidencial en el 2014. Yo sólo quiero ser el presidente de la pieza donde vivo, y solo quiero ser el primer mandatario de mi cama, así a mi cama le falte una Primera Dama.
-¿En qué te puedo ayudar, Juan Manuel?, le dije tuteándolo para darle cierta confianza, con voz dormida y medio enguayabada.
-Los estudiantes se están tomando Bogotá. Están marchando dizque para que la universidad pública no se marche de la vida de este país…
- En ese caso sería mejor que organizaran una pequeña marcha, mejor dicho, una marchita, para que la universidad pública no se marchite.
- Salazar, la situación es seria -me dijo Juan Manuel con voz de puro cadete de la Escuela Naval de Cartagena, institución donde estuvimos juntos y de donde le quedó la costumbre de llamarme por mi apellido.
El Presidente hizo una pausa de nueve segundos y entonces, utilizando un lenguaje poco aristocrático, para que estuviera a mi alcance y mi entendimiento, me explicó:
-Este paro está duro y berraco, es una de las cosas más arrechas que he tenido que enfrentar bajo mi gobierno.
- En ese caso se trata no de un paro estudiantil sino de una Parola Estudiantil –le dije sacando de mi ser lo más elegante de mi vocabulario popular.
-¿Qué hacemos, Salazar, para conjurar el paro?
- ¿Qué tal si les ponemos pico y placa a los estudiantes según el último dígito de la cédula?
-Necesitamos algo más radical. Con el pico y placa se controlan los carros, pero no a la MANE.
-¿La Mane? ¿Qué es esa vaina?
- La Mesa Amplia Nacional Estudiantil (o Estupiantil, como quieras)
- ¡Qué manes tan berracos!
- ¿Qué dices?
- ¡Qué desmanes y desordenes tan berracos!, señor Presidente.
- ¿Qué se le ocurre, Salazar, para conjurar el paro?
- ¿Ya echaste el viejo y clásico cuento de que el paro está infiltrado por la guerrilla?
- Sí, pero fue un Farcraso total. Hasta Plinio Apuleyo se burló de la cosa.
- Entonces, Juan Manuel, no queda otro camino que acudir al “hidroterrorismo”.
- Al “hidroterrorismo”, ¿cómo así?
- Planificar un aguacero o una granizada ni la tenaz a fin de disolver la marcha.
- Buena idea. Así podríamos descabezar al movimiento.
- ¿Descabezarlo, Juan Manuel? ¿Quieres que llame a un amigo paraco que tengo y le pida prestada la motosierra?
-No, Salazar. No me refiero a eso. Si logramos que llueva, a lo mejor a Jairo Rivera se le enchuta el pelo y así el hombre no le jala a liderar el movimiento estudiantil.
-Hagamos una cosa, Juanma. Me levanto, me ducho, me visto y te llamo. Mientras tanto se me ocurre que puedes amenazar con expulsar al movimiento estudiantil de la Unidad Nacional…
-Buena idea. Espero su llamada. Ayúdeme con otro problema: los estudiantes exigen la renuncia de la Ministra de Educación.
- ¡Qué irrespeto con la señora ministra de Heducasión pedirle la renuncia a la brava! Es que hay cosas que a una dama no se le pueden pedir a las malas. Pero pensándolo bien, Juan Manuel, no me parece descabellada la idea de que renuncie…
- ¿Qué renuncie? ¿Está loco? Eso políticamente no sería correcto. El desempleo nuevamente se subiría a dos dígitos…
- Pero a mí nunca me ha perecido que la señora cuadre en el Ministerio de Educación. Como ministra de Educación me parece una buena presidente de la Cámara de Comercio de Bogotá…
- Precisamente. Para privatizar la educación, ¿no le parece nada mejor que una comerciante con experiencia en el sector financiero...?
- Sí, pero desde el punto de vista semántico, lo lógico sería que María Fernanda Campo ocupara el Ministerio de Agricultura.
-Bueno, en ese caso ¿qué haríamos con Juan Camilo Restrepo Salazar?
- No te preocupes, yo hablo con mi primo y le explico que debe sacrificarse. Le digo que su retiro es el precio que tenemos que pagar para tratar de buscar el apoyo del doctor Uribe.
- No, no, ¡cómo se le ocurre! Si Uribe me apoya, me caigo.
- Bueno, entonces, qué te parece si le decimos a la opinión pública que la ministra no pasará carta de renuncia hasta tanto no aprenda a escribir.
- Genial, Salazar. Así ganamos tiempo.
- Y dile a María Fernanda, que cuando renuncie la llevamos de paseo al Campo.
- OK, hablamos.
Así, pues, no había otra opción. Tenía que levantarme. La Patria requería de mis servicios. Una buena razón para madrugar a las 9 de la mañana un jueves. Y no hay mal que por bien no venga: duchándome me dí plena cuenta de que mi masculinidad acababa de unirse al paro estudiantil. Los estudiantes contaban con mi total apoyo. O mejor dicho, las estudiantes. ¡Qué rico es bañarse con agua caliente los jueves!
Y ahora el problema diario: ¿Cómo me visto? ¿Qué me pongo? Nada mejor que prender el radio cuando uno va a tomar difíciles decisiones. Escoger la indumentaria del día no es fácil, así el ‘ajuar’ de uno se componga de dos pantalones, dos camisas y dos pares de zapatos. Aunque uno lo crea, las combinaciones son muchas. He llegado a contar hasta diez posibilidades distintas. Por fortuna la música clarifica la mente.
¿Qué me pongo? ¿El blue jean con la camisa roja a cuadritos?
Atención, radioescuchas del país. Ciento cincuenta mil estudiantes de 32 universidades públicas, apoyados por aproximadamente 10 universidades privadas, se toman Bogotá. “Contra la privatización de la universidad pública, lucha sin desmayo”, corean los estudiantes. “Un pueblo sin piernas pero que camina” escribió la twittera @Valery_Quintero. “Mi apoyo incondicional a la marcha. No tengo para el bus” expresó @ cucharitadepalo.
Urgente: Estudiantes de las universidades de “garaje” también están en auto-paro. Incluso los estudiantes de las universidades a distancia, están protestando de manera presencial. Bogotá está convulsionada. “Paramos para que la historia avance”, declaró un líder estudiantil.
¿O más bien me pongo el otro blue Jean con la camisa azul de rayas?
Atención, última hora. La señora ministra de Educación, doctora María Fernanda Campo, intentó rebatir las pretensiones del movimiento estudiantil según las cuales la educación superior pública debe ser gratuita y de calidad. “Las universidades públicas, como las mujeres publicas, no pueden ser gratuitas, porque una cosa es la universidad pública y otra la universidad púbica.”, manifestó la ministra en medio de una rechifla.
Urgente, Bogota. En enérgico discurso el presidente de la Republica, doctor Juan Manuel Santos, se dirigió al estudiantado. “Muchachos o vuelven a sus pupitres o aprobamos la reforma a la ley 30 a pupitrazo limpio”, les dijo el primer mandatario.
Listo: me pongo cualquiera de los blue jeans. Al fin y al cabo son prácticamente iguales.
Extra, extra. Alerta, Bogotá. Un escuadrón del Esmad se ha unido al movimiento estudiantil. “Es Madavilloso”, dice un policía. “Son las primeras consecuencias nefastas de la política del amor preconizada por Petro”, denunció un congresista que pidió mantener su nombre en reserva. “El abrazotón es una forma de irrespeto y acoso sexual a las autoridades”, señaló el parlamentario.
Aviso Clasificado. Miembro del Esmad, victima del manoseo, besuqueo y el “abraceo” busca trabajo en empresa de vigilancia privada que le garantice distancia con el público.
Ultima hora, Santiago de Chile. La líder estudiantil Camila Vallejo anunció que viajará a Colombia para hacer una maestría en manejo de movimientos estudiantiles. Como es lógico, la Vallejo se unirá a las marchas de la universidad del Valle.
Atención, último minuto: Amparo Grisales se une al movimiento estudiantil a fin de inyectarle juventud y brios. El movimiento estudiantil se torna imparable. Colombia tiene erizada la piel.
Resuelto el asunto del pantalón, me queda el problema de escoger la camisa. A ver, a ver. Creo que entre las dos camisas debería escoger la azul. Hace juego con el azul del cielo y, además… ¡la roja está sucia!
Últimas noticias, atención. El presidente se compromete retirar el proyecto de reforma de la ley 30, si los estudiantes se retiran a sus casas en 30 minutos. “Prometo que no les haré Bugs Bunny”, dijo el mandatario utilizando un modismo gringo. “Pero no les prometo que no les haré pistola”, añadió el presidente, utilizando una expresión bastante colombiana.
Urgente, urgente. El ex presidente Francisco Santos criticó el manejo que el Gobierno le ha dado al movimiento estudiantil y pidió utilizar armas no letales como tasers o pistolas de electroshock contra los jóvenes. “Hay que meterle voltios al paro si queremos voltiar la situación”, balbuceo Francisco Santos en su videoblog, como director de RCN La Radio, que tituló: Le miden el aceite al Presidente y a mí el cociente intelectual… “Desenchúfate, desenchúfate, Pachito, vete a descansar”, comentó un electricista.
Atención. Ultimo minuto. “Pacho Santos debería ser el Ministro de Defensa” dijo en rueda de prensa el doctor José Obnubilado Gaviria.
¿Cuál par de zapatos me pongo? ¿Este o ese? A la final da igual: ambos pares son negros. Me pongo los que están embolados y listo el pollo. ¿Chaqueta? No hay problema, está plenamente resuelto: la única, la de siempre.
Atención, Colombia. Urgente. Hace algunos minutos el ex presidente Francisco Santos se retractó de sus palabras y ofreció excusas a los estudiantes.
Alerta, urgente. En un breve comunicado, paramilitares del centro del país cuestionaron la rectificación del doctor Francisco Santos. “No se nos ‘patrasee’ doctor Pacho. A lo dicho póngale el pecho, y listo.”, expresó el Bloque Capital.
- Alo, Juan Manuel. ¿Dónde estás?
-Aquí, defendiendo la democracia, maestro. Estoy mamado.
- Te tengo la solución, Juanma: cambia de posición. Solo lo idiotas –y una novia que yo tenía en el 95- no cambian de posición.
-¿Cambiar de posición?
- Sí, Juan Manuel. Retira el proyecto de Reforma sin más. Echa reversa. Si los estudiantes te piden condiciones para levantar el paro, no aceptes más de tres puntos. Recuerda que en este caso, recular es la forma de sacarle el culo al autoritarismo.
- Me parece buena idea, Salazar. Pero estoy mamado. Hasta tengo ojeras…
- Pues volémonos a descansar, Presidente. Vámonos al Tayrona, al hotel ese de siete estrella, que con usted y yo allá, lo volveríamos de nueve…
-No podemos, Salazar. Ese proyecto lo eché para atrás.
@dicksalazar