Tengo la impresión de que Darío Silva habla las 24 horas del día, rápido, sin parar, dejando por el camino granos de humor y muchas anécdotas y enseñanzas.
Le he seguido los pasos desde Pitalito, al sur del Huila, donde inauguró y dirigió Radio Sur, la emisora del médico Castro. Venía de Garzón, cerca de su natal Tarqui. Yo me enamoré de la radio, escuchando el poder de su palabra. Hoy pienso que no hay mejor orador que Darío, cautivador, al margen de asuntos religiosos o políticos.
Cuando los noticieros de la mañana sólo iban hasta las 8, Darío se inventó cómo ir hasta las 9 con “perspectiva”, para adelantarse a los sucesos del día. En mi condición de reportero político de la cadena tuve el privilegio de hacer parte de su combo.
Después fui testigo de su ascenso, de sus triunfos y finalmente su caída, el infierno noticolor. Primero lo querían tumbar por respaldar un gobierno y después por no estar de acuerdo con el siguiente.
Alguna vez lo escuché –en privado, en un almuerzo- cuatro agradables horas, sobre Dios, la biblia, su iglesia Casa Sobre la Roca. Estuve a punto de sucumbir, pero me negué a pertenecer a su credo, especialmente preocupado por el tema de los diezmos.
En calidad de periodista asistí a la celebración de sus 75 años, 50 de periodismo y 25 de pastor, una vida de influencia.
Silva hizo énfasis en que el homenaje no era para el burro sino para el que lo monta, refiriéndose a Dios.
A sus 75 años lo veo casi con los mismos ímpetus que le conocí en el Huila. Y Darío responde ante el elogio:
-“Es porque en su palabra que es La Biblia el Señor dice que los que lo seguimos a él nos hará renovar las fuerzas como las águilas. Estoy muy agradecido porque a pesar de la edad… tengo alguna vitalidad todavía para seguir dando lora".
Darío recordó sus tiempos de soldado raso, al lado de un compañero inolvidable con el que no paraban de hablar, el también periodista Poncho Rentería. ¡Imagínense ese par en la milicia!.
Estuvo bajo el mando del coronel Julio Londoño Paredes y el general Carlos Lombana Cuervo, quien después fue pastor en su iglesia.
Darío dejó atrás los micrófonos dando malas noticias. Y se dedicó a dar buenas en el púlpito.
Silva fue elogioso con Santos y éste con el pastor, que cuenta con más de 30 mil de-votos que pueden sufragar en las siguientes elecciones.
“Yo he predicado desde un principio –dice Darío- que el cristianismo no sea una religión muerta y aburrida que a nadie salva y a nadie redime, sino que sea una manera de ser y de vivir, como el sermón del monte o de la montaña nos enseña a convivir en sociedad, que se practique en nuestras vidas.
"Entonces, en la vida se dice Jesucristo es el príncipe de paz. El profeta Isaías lo anuncia diciendo príncipe de paz. Cuando Él nace los pastores oyen decir a los ángeles paz en la tierra. Cuando Él se va a marchar hacia el calvario le dicen mi paz les dejo, mi paz les doy. Cuando resucita les dice paz a ustedes. Debemos honrarlo haciendo todos los esfuerzos posibles porque Colombia tenga paz.
"Pero como lo dije, la paz también sale del corazón, y es allí donde las iglesias tenemos que trabajar, no en cuestiones políticas, inclusive ni económicas, sino en el interior del corazón de las personas”.
Silva lamenta los recientes escándalos que involucran a una iglesia partido y comenta que “en el propio grupo de Jesús que eran 12, el que manejaba los dineros era Judas”.
En el caso de Casa sobre la Roca, Darío dice que la pulcritud es norma de su iglesia, “no hay posibilidad de que un dinero vaya a un fin que no sea el adecuado. Y los pastores, cada año, presentan su declaración de renta ante un notario, una declaración juramentada sobre nuestros bienes y los de nuestras esposas. Y la mía está en la página web de la iglesia, y ahí está claro qué es lo que tenemos.
“No tenemos absolutamente nada en la iglesia que permita alguna sospecha”.
Darío opina que las iglesias cristianas en general se someten a las leyes del país. “Pero a veces hay grupos sectarios, grupos familiares donde las cosas no se hacen tal como La Biblia lo dice. Pero por el hecho de un grupo no se puede generalizar. En Casa sobre la Roca todo está en orden y cualquiera puede revisar perfectamente qué es lo que se hace con los dineros que allí ingresan”.
Con el apoyo de Darío Silva y sus instituciones educativas, Falcao García se hizo bachiller. La lista de profesionales exitosos que ha patrocinado Casa sobre la Roca es larga.
“En este 2014, háganos el catorce de la paz”, finalizó en términos coloquiales su discurso el poderoso orador.
Santos, quien dijo que también tiene inspiraciones divinas, se comprometió a que este año habrá paz en Colombia. Y celebró una ocurrencia de Darío sobre el tema de la reconciliación: que en el mismo recinto se abracen un seguidor de Santa Fe (el presidente) y otro de Millonarios.
Darío se jactó de haber pronosticado que Juan Manuel Santos –apenas un muchacho en la burocracia cafetera de Londres- llegaría a ser Presidente de la República.
¡Y eso que todavía no era profeta!
Santos y los de-votos de Darío Silva
Lun, 03/02/2014 - 16:15
Tengo la impresión de que Darío Silva habla las 24 horas del día, rápido, sin parar, dejando por el camino granos de humor y muchas anécdotas y enseñanzas.
Le he seguido los pasos desde Pital
Le he seguido los pasos desde Pital