El tercer año legislativo del Senado de la República ha sido uno de los más arduos de enfrentar, trabajamos por la recuperación y reactivación económica, y nos enfocamos en escuchar el sentir de las personas que salieron a protestar pacíficamente en medio del Paro Nacional.
No obstante, a pesar de las dificultades presentadas, en el Congreso logramos cumplir con nuestra labor trabajando en aras del beneficio de los colombianos. Aprobamos leyes que fortalecerán el tejido social, económico y productivo del país, que tanto ha sido golpeado en medio de la crisis sanitaria y financiera a causa del Covid-19.
Como vicepresidente de la Comisión Tercera Constitucional Permanente del Senado de la República, presidí varias sesiones enfocadas a la reactivación económica. En este período logramos aprobar 44 proyectos de ley. Socializamos en debates de control político temas de pobreza extrema, licores, vulnerabilidad, programas sociales, financieros y educativos, sobre la pandemia del Covid – 19, la política de defensa jurídica intensiva y el informe de gestión del Banco de la República, del cual fui citante. Además, aprobamos proyectos de ley como la exoneración de costos operativos, la iniciativa que busca impulsar y proteger el viche y sus derivados como bebida alcohólica, ancestral, artesanal, tradicional y patrimonio colectivo de las comunidades negras de la costa del Pacífico colombiano; entre otros. Asimismo, realizamos audiencias públicas y foros para escuchar las opiniones de la ciudadanía sobre la reforma tributaria y la renta básica.
Desde mi posición como senador de la República trabajé arduamente en distintos proyectos de ley que hoy vemos luz verde a que se conviertan en ley de la República; fue así que con el proyecto de ley de Tapabocas Inclusivos, de mi autoría, busqué adentrarme en la inclusión social en medio del Covid-19, promoviendo e incentivando el uso de tapabocas inclusivos que cuenten con un visor y/o demás elementos transparentes que permitan la adecuada lectura de labios e interacción de personas con discapacidad auditiva. Conté con el apoyo total del Senado de la República y Cámara de Representantes, y el proyecto fue aprobado por unanimidad dando paso a su conciliación el 17 de junio de 2021. Ahora solo queda esperar su sanción presidencial para poder beneficiar a más de 550.000 personas en condición de discapacidad auditiva, que, desde marzo de 2020, con el uso obligatorio de tapabocas convencionales, luchan con una barrera comunicacional al no permitir la lectura de labios en escenarios de atención al público.
Aspiro para la próxima legislatura concretar proyectos de ley que contribuyan a la reducción de la pobreza, rompiendo las brechas de desigualdad generando mayores oportunidades laborales y educativas; seguir con el plan de reactivación económica; brindarle alivios económicos a los colombianos que se vieron afectados con la pandemia; mejorar la atención integral de instituciones prestadoras de salud en el duelo gestacional y neonatal; lograr preservar las joyas naturales que tiene el departamento del Atlántico; exonerar los costos operativos al Gobierno para las transacciones monetarias no condicionadas y poder así seguir ayudando a millones de personas con los programas sociales, entre otras iniciativas.
En el último período Cuatrienio Constitucional buscaremos ejercer el control político al ejecutivo para el desarrollo de programas y proyectos que permitan la generación de empleo y el soporte a las pequeñas y medianas empresas.
Y para las madres que han afrontado junto con sus familiares, la muerte en el duelo gestacional y neonatal, quiero decirles que mi compromiso con ellas es irrestricto. En la próxima legislatura haré todo lo posible para volver a tramitar y convertir en ley de la República la iniciativa de establecer una atención integral en las instituciones de salud para que todas las madres de Colombia puedan tener un trato humanizado e integral.
“¡Mi compromiso con Colombia, no para!"
