En la costa del distrito de Huanchaco, al norte de Perú, fue hallado el mayor sacrificio de niños de la historia, según arqueólogos. Al menos 140 menores fueron sacrificados de manera simultánea y enterrados en la costa como parte de un ritual indígena.
Los investigadores atribuyen el hecho a la civilización Chimú que habitaba la costa ecuatoriana. Los restos de los niños fueron hallados a menos de un kilómetro de distancia de las ruinas de la Chan Chan, la capital chimú. Según determinó la datación por radiocarbono el ritual se habría desarrollado entre los años 1400 y 1450.
El hallazgo fue relatado en exclusiva por la revista científica National Geographic en el que se describe los cuerpos. Estaban enterrados, la mayoría con desarrollo de 8 a 12 años de edad, algunos de los cuerpos estaban junto a cuerpos de llamas bebés que tendrían entre 8 y 9 meses al momento del sacrificio, se han hallado 200 de estos animales en el cementerio indígena.
Los cuerpos presentan una tonalidad rojiza en el cráneo lo que indica que podrían tener algún tipo de tinta en el rostro al momento de su sacrificio. Los investigadores no pueden establecer que se haya desarrollado durante un solo día, pero sí afirman que debió suceder en el transcurso de unos días o semanas.
Los cuerpos presentan heridas óseas en el pecho, algunos con fractura en el esternón y costillas, lo que indicaría, según los investigadores, que el sacrificio consistió en retirarles el corazón a los niños, aunque aseguran que eso es difícil de establecer.
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La investigación adelantada por Gabriel Prieto y John Verano, de la Universidad Tulane, concluye que todas las civilizaciones precolombinas realizaron sacrificios pero que es posible que no exista un hecho de las mismas dimensiones en el territorio americano ni, especulan, en el mundo.
Aunque no se ha logrado establecer con certeza la causa del sacrificio masivo de menores, el invetigador Gabriel Prieto, paradojicamente, considera que puede ser respuesta al fenómeno del 'Niño'. Prieto dice que el sacrificio de bienes preciados como los niños y las llamas, principal animal de alimento y carga de la cultura Chimú, evidencia el desespero de los chimús por una concesión divina.
Además, la zona donde fueron hallados es conocida por su constantes temporadas de lluvia que podrían haber sido la causa de una crisis al interior de la civilización. También, por evidencias arqueológicas, se estableció que los cuerpos estuvieron expuestos al agua. La petición pudo ser que cesaran una temporada de lluvias en la zona donde estaba la civilización.
La población Chimú conformó uno de los imperios más grandes y organizados del siglo XV en continente americano, pero esta cultura precolombina cuenta con pocos registros y crónicas de la época debido a que a mediados de 1475 fueron conquistados por los incas.
