La fiscalía presentó tres grupos de pruebas contra la abogada Paola Salgado dentro del proceso que se le sigue a la exfuncionaria del distrito por los delitos de fabricación, tráfico, porte de armas, municiones de uso exclusivo de las Fuerzas Militares y violencia contra servidor público.
La defensa de Salgado, la abogada defensora de derechos humanos Gloria Silva Tovar, indicó que las pruebas que presentó el ente acusador ni son sólidas, ni comprometen a Paola con el ELN, y ni mucho menos la involucran con los disturbios que se presentaron el pasado 20 de mayo en la Universidad Nacional. Lea también: Cae la mujer de las 14 identidades.
La fiscalía, desde que inició la audiencia contra Salgado y las demás personas involucradas en el proceso, ha mostrados diferentes pruebas que según la fiscal evidencian su participación en las acciones que se investigan.
En el caso de Paola Salgado, la fiscal séptima delegada ante la unidad nacional antiterrorismo presentó en su contra interceptaciones telefónicas con los demás investigados; fotografías en las que presuntamente se evidencia que la abogada se reunió días antes de los disturbios del 20 de mayo con David Camilo Rodríguez, alias 'El Profe', Gerson Yacumal y Héiler Lamprea, según la fiscalía, organizando los hechos posteriores y declaraciones con reconocimiento fotográfico de un vigilante de la Universidad Nacional, este reconoció a Paola como la persona que transportó los explosivos hasta el centro educativo el mismo día de los hechos. Lea también: ‘Las gatúbelas’, presuntas asaltantes, el terror de varios hombres.
Según la abogada Tovar, ninguna de estas pruebas que se presentaron contra su defendida logran vincularla directamente con las investigaciones en curso.
Para la defensa, varios de los documentos hallados en la residencia de Paola Salgado son de dominio público, que se encuentran en cualquier biblioteca de alguien estudioso de la historia colombiana y otros los tenía la abogada investigada porque le fueron entregados en lugares que ella ha frecuentado, como cualquier persona podría tenerlos.
Sobre las llamadas telefónicas interceptadas, en las que se evidencia que Paola sostuvo conversaciones con otros de los investigados y las fotografías en las que se ve a Paola reunida con Rodríguez, Yacumal y Lamprea, “lo único que evidencian en contra de Paola es que conoce a parte de los investigados”, indicó la abogada. Lea también: Ella vendía seguros fúnebres y la acusan de matar a sus clientes.
La prueba más fuerte de la fiscalía en contra de la defensora de 33 años, al parecer, es la versión de uno de los vigilantes de la universidad, que, según el ente acusador, declaró haber reconocido a Paola como la mujer que ingresó los explosivos hasta uno de los salones del conservatorio de música de la universidad.
La fiscalía indicó que el vigilante, quien después de sus declaraciones manifestó ser víctima de amenazas contra su vida, logró hacer un reconocimiento fotográfico en el que confirmó haber visto a Paola en el mismo lugar donde minutos más tarde hallaron las dos cajas con 180 papas bomba.
Según la abogada Tovar, por las conversaciones llevadas a cabo con su cliente, es imposible que aquel vigilante haya visto a Paola Salgado en la universidad Nacional.
También indicó la abogada Tovar que las declaraciones del vigilante con las que quieren hacer ver a Paola en aquel sitio y relacionarla con los disturbios del 20 de mayo en los que varios miembros de la policía resultaron heridos, están llenas de incongruencias y contradicciones.
“La descripción física de la persona que describe el celador y que luego identifica en fotografías como Paola no tiene nada que ver con la fisionomía de mi defendida. Él habla de una persona morena y de contextura gruesa, descripción que no corresponde con mi representada”, indicó la abogada de Paola Salgado.
La abogada Tovar calificó el trabajo de la fiscalía como una investigación llena de baches y vacíos. También indicó que lo que pretende la fiscalía con las imputaciones llevadas a cabo, evidentemente, es hacerle daño a los investigados.
Según la abogada, la fiscalía no les imputó el delito de rebelión a los investigados, para complicarles la situación, ya que si les imputaba aquel delito, este absorbía los otros delitos imputados y una condena por rebelión arrancaría desde los ocho años, a diferencia de una por los delitos que les fueron imputados, que arrancaría desde los 20 años.
“Ahora, para justificar la solicitud de la medida de aseguramiento, la fiscalía sí está diciendo que estos muchachos tienen que estar en una cárcel porque si no se vuelan para un campamento. Esa una actuación desleal y un argumento peligrosista que evidencia el afán de la fiscalía de tener a estos muchachos privados de su libertad y un interés en afectarlos”, declaró la abogada Tovar.
Para la abogada esta hipótesis del ente acusador, en la que basa su solicitud de la medida intramural, es un absurdo de la fiscalía. “La fiscalía no se ha tomado el trabajo de mirar el arraigo de la persona. La mayoría de estos muchachos son estudiantes, que tienen un arraigo evidente en Bogotá. En el caso de Paola, que tiene dos trabajos, que tiene deudas bancarias, que tiene una responsabilidad muy clara con su mamá, y con sus abuelos, es absurdo que ahora digan si no otorgan la medida se vuelan para un campamento.
Tovar indicó que por el tipo de delito imputado y por su experiencia profesional han preparado psicológicamente a Paola para posiblemente afrontar el proceso desde las rejas de la cárcel el Buen Pastor.
Preparan psicológicamente a Paola Salgado para que vaya al Buen Pastor
Mié, 22/07/2015 - 10:47
La fiscalía presentó tres grupos de pruebas contra la abogada Paola Salgado dentro del proceso que se le sigue a la exfuncionaria del distrito por los delitos de fabricación, tráfico, porte de arm