Mientras que con sus dedos índice y pulgar de la mano derecha acomodaba el anillo que lucía en el dedo meñique de su mano izquierda, Julio Grondona escuchaba a Andrés Pastrana. Lea también: Colombia y un debut de riesgo
“Julio, le harías un daño muy grande a Colombia si Argentina no participa”. También le puede interesar: Sacan manual para que colombianos se porten bien en Chile
Pastrana trataba de convencer a Grondona, fallecido presidente de la Asociación de Fútbol Argentino, para que la selección de ese país jugara la primera Copa América que se iba a llevar a cabo en Colombia en 2001. No lo logró.
“Vamos si usted me asegura económicamente a los jugadores”, le respondió el jerarca del balompié gaucho. En ese momento Argentina contaba, entre otros, con Gabriel Omar Batistuta, campeón con la Roma y uno de los jugadores más caros del mundo (30 millones de dólares).
“Es imposible para el gobierno asegurar a las selecciones. No cuento con ese dinero”, le dijo Pastrana.
“Entonces no vamos”, concluyó Grondona.
Antes de salir de las instalaciones de la Conmebol en Paraguay, a la que Pastrana había acudido en compañía de todos los alcaldes de las ciudades sede de la Copa América para convencer a Argentina de participar en el torneo, Pastrana le dijo a Grondona: “No le puedes hacer un daño a un país como el que me estás haciendo, ojalá nunca te pase”, y se fue. Dos semanas después de que se acabara la Copa en Colombia, en Argentina secuestraron al hermano de Juan Román Riquelme.
Grondona, que también ignoró el pedido del expresidente Fernando De la Rúa que quería que Argentina participara, tenía razones para no exponer a los jugadores de su selección. Colombia atravesaba una difícil situación social. Era la época de las llamadas pescas milagrosas, los secuestros, y los carros bomba (estallaron tres un mes antes de la Copa), el proceso de paz atravesaba momentos difíciles y semanas antes, las Farc habían secuestrado a Hernán Mejía Campuzano, por ese entonces, vicepresidente de la Federación Colombiana de Fútbol.
Aunque lo liberaron 72 horas después, las dudas en el seno de la Conmebol estaban vivas. El presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol Ricardo Texeira presionó para que el torneo se realizara en su país.
Sin embargo, el cinco de junio, según el portal de Gol Caracol, “la Confederación Suramericana, presionada por Traffic, Coca Cola, Master Card y Telefónica, patrocinadores del evento que amenazaron con demandarla por 50 millones de dólares, ratificó la sede para Colombia y determinó que todo quedaba como antes y que el evento empezaría el 11 de julio como se tenía planificado”.
Tres años después, Nicolás Leoz, expresidente de la Conmebol y hoy condenado por corrupción en la FIFA, señaló que "las Farc querían ver la Copa América en 2001". "Las Farc liberaron finalmente a Mejía 72 horas después de su secuestro porque querían ver la Copa América. Ellos se equivocaron. Fueron momentos de mucha tensión. Decidí finalmente hacer la Copa a pesar de la deserción de Argentina, con las garantías que recibimos del presidente(de Colombia, Andrés) Pastrana", relató el exdirigente de la Conmebol.
Ante la negativa de los argentinos, fue invitada a última hora la Selección de Honduras, que llegó al país en un vuelo dispuesto por la Fuerza Aérea Colombiana.
“No se puede tapar el sol con un dedo, teníamos bronca porque Argentina no nos apoyó en ese momento”, le dijo a KienyKe.com, Víctor Hugo Aristizábal, delantero de la Selección Colombia que salió campeón y goleador del torneo. Hizo seis goles.
Aristizábal reconoce que el grupo también sintió tristeza por el portazo de Argentina. “Pero no nos podíamos quedar tristes porque había otras selecciones que querían ganar el campeonato y si nosotros dejábamos, íbamos a pasar sin pena ni gloria”.
“Vamos a buscar la gloria. Tenemos con qué”, Aristizábal recuerda que esas fueron las palabras que Francisco Maturana, el técnico de la Selección Colombia en 2001, le recordó siempre al grupo de jugadores.
‘Pacho’ Maturana se hizo cargo de ese equipo luego de que la Confederación despidiera a Luis Augusto ‘El Chiqui’ García por no haberle podido ganar a Venezuela en un partido de las Eliminatorias para el Mundial de Corea y Japón 2002.
Para el torneo, que fue rebautizado como la ‘Copa de la Paz’ y “una oportunidad de mostrarle al mundo que Colombia era más que narcotráfico y violencia”, según Ariztizábal, fueron convocados: Óscar Córdoba, Iván Ramiro Córdoba, Mario Yepes, Jairo Castillo, Andrés Orozco, Fabián Vargas, Elson Becerra, David Ferreira, Víctor Hugo Aristizábal, Giovanni Hernández, Eudalio Arriaga, Miguel Calero, John Restrepo, Iván López, Elkin Murillo, Jersson González, Juan Carlos Ramírez, Roberto Carlos Cortés, Freddy Grisales, Gerardo Bedoya, Óscar Díaz, Mauricio Molina.
Esos 22 jugadores quedarán en la historia como los primeros que le dieron a Colombia un título continental.
En la fase de grupos, Colombia se enfrentó a Venezuela, Ecuador y Chile, ganándoles 2-0, 1-0 y 2-0 respectivamente. Todos los compromisos se disputaron en el Estadio Metropolitano Roberto Melendez de Barranquilla.
Clasificados con nueve puntos en el grupo A, la tricolor se impuso 3-0 en los cuartos de final frente a Perú. El compromiso tuvo lugar en el Estadio Centenario de Armenia.
“Ese día anoté el gol más bonito del torneo. Fue un sostenido muy bonito, el último gol del partido”, recordó Arizitizábal en diálogo con KineyKe.com.
En la semifinal Colombia enfrentó a Honduras, equipo que venía de dar el palo del torno tras eliminar a Brasil 2-0. "Yo, Luis Felipe Scolari, quedaré en la historia como el entrenador que perdió ante Honduras. Es horrible, pero ellos jugaron mejor", dijo tras ese encuentro el técnico de la canarinha.
Al equipo hondureño, Colombia lo derrotó 2-0 y logró el paso a la final. Contra México, en Bogotá, la tricolor buscaría la gloria.
“Había mucha tensión, el primer tiempo fue muy enredado. México nos complicó lo que se había preparado pero una pelota quieta, que en el fútbol es tan importante, logró desenredar el partido”, recordó a KienyKe.com Óscar Córdoba, arquero de la Selección Colombia que no recibió ningún gol durante el torneo.
El exBoca, señaló que el partido, como el resto de la Copa fue “especial porque se sintió el apoyo de todo el pueblo colombiano. Lo que se vivió antes, durante y después. Además, el hecho de que Colombia pasara un momento social difícil, hizo que todo el país se volcara para demostrar que somos un país con más cosas positivas que negativas, eso fue muy bonito para nosotros como jugadores”.
En la final, el 29 de julio de 2001, 47 mil personas se dieron cita en el Estadio Nemesio Camacho El Campín. La explosión, a la que tanto le tuvieron miedo los argentinos, se dio en el minuto 19 del segundo tiempo, cuando Iván López lanzó un centro al área mexicana e Iván Ramiro Córdoba, capitán del equipo, cabeceó el balón y anotó el gol que le dio el título a la tricolor.
“Yo venía con una molestia muscular que no sabía si jugar o no esa final, a lo último decidí jugar porque fueron más fuerte las ganas que otra cosa. Después, al minuto 31, tuve que salir por la contractura en la pierna derecha. En el momento del gol se me olvidó la lesión y salí corriendo a celebrar”, recuerda Ariztizábal.
(Video) Todos los goles de Colombia en la Copa América de 2001
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Para la Copa América 2015, Colombia vuelve a debutar frente a Venezuela. Será el próximo domingo a las 3:00 pm hora local.
"Colombia es mi firme candidata a ganar la Copa América", dice Iván Ramiro Córdoba.
El autor del gol que le dio el título a Colombia hace 14 años, dijo en diálogo con el diario AS: "Hace mucho tiempo que la Selección va a la Copa América 'a ver qué se puede hacer'. Por primera vez somos firmes candidatos y tenemos el equipo para poder pelear por el título. No recuerdo habernos sentido tan preparados para una Copa América, lo que más se acerca de pronto es la que ganamos en el 2001, pero no se compara con esto que sentimos ahora”.
La hazaña que Colombia quiere repetir en Chile 2015
Mié, 10/06/2015 - 11:42
Mientras que con sus dedos índice y pulgar de la mano derecha acomodaba el anillo que lucía en el dedo meñique de su mano izquierda, Julio Grondona escuchaba a Andrés Pastrana.