Nick Kyrgios volvió a hacer de las suyas en un campo de tenis tras protagonizar un acto bochornoso en el ATP Masters 1000 de Cincinnati. No solo perdió el juego sino también su paciencia y control
Nick Kyrgios volvió a hacer de las suyas en un campo de tenis tras protagonizar un acto bochornoso en el ATP Masters 1000 de Cincinnati. No solo perdió el juego sino también su paciencia y control de sí mismo al caer en su debut.
El australiano inició ganando el encuentro 7-6, pero vio la derrota en seguida en el segundo set al caer 6-7 con Karen Khachanov. En ese instante los dos se dirigieron a sus respectivos puestos para tomar el descanso permitido cuando de repente Kyrgios se dirigió a los camerinos con dos raquetas en sus manos.
Minutos atrás el tenista le había pedido permiso de ir al baño al juez de silla, pero éste se negó por el poco tiempo que había. Kyrgios hizo caso omiso a la respuesta de la autoridad y emprendió su rumbo hacia el camerino.