Los monocultivos pueden ser bastante perjudiciales y los de café, en efecto, no son la excepción para el medio ambiente. Los químicos y la deforestación resultan por afectar los ecosistemas y por
Los monocultivos pueden ser bastante perjudiciales y los de café, en efecto, no son la excepción para el medio ambiente. Los químicos y la deforestación resultan por afectar los ecosistemas y por esa razón es fundamental crear conciencia de cómo se cultiva y cómo se previene.
Café Libertario, una de las empresas que ha tomado más fuerza en Bogotá y Colombia, le ha apostado a invertir para disminuir los daños ambientales. Dirigen el 3 % de sus ventas a la mejora de producción para que las personas disfruten de buena calidad y contribuyan a este cambio.
"Estamos comprometidos con todos los ecosistemas cafeteros. Queremos ser uno de los oferentes que reconoce el costo social y lo paga. Tenemos que reforestar y comprometernos", señaló a Kienyke.com Felipe Sardi Aristizábal, cofundador de Café Libertario.
¿Cuál es el daño del café al medio ambiente?
"La mayoría de cultivos de café son monocultivos (no son asociados con otro árbol) y requiere de muchos insumos externos para nutrirse. Aquí no hay un sistema cíclico y necesita de pesticidas y químicos que producen gases de efecto invernadero. Eso crea un impacto ambiental importante", explicó Sardi.
Incluso, el empresario cafetero expresó que para 2050 el 50 % de la tierra no será apta para cultivar café por esos cambios que alteran los ecosistemas.
"Cada vez los cultivos aguantan menos el cambio climático y por eso suben los pisos térmicos provocando deforestación para lograr producir", puntualizó el cafetero.
El objetivo es modificar la forma de cultivo de este producto para reducir sus daños y que en un futuro los consumidores puedan tener conciencia de qué consumen en pro de lograr una vida más sana con reducción en los daños ambientales.
Más acerca de Café Libertario
La empresa, que tiene su sede principal en la calle 70a ## 5 - 37 de Bogotá, abrirá en noviembre su tienda en el barrio Getsemaní de la ciudad de Cartagena.
"Queremos ofrecer un producto de calidad, que las personas tomen café y vivan ese ritual de la mejor manera. Son experiencias que hacen cambiar el concepto del café y de cómo se disfruta este producto", contó Elisa Madriñan, confudadora de la organización.