Tras el paso de la tormenta tropical Tembin en Filipinas las autoridades reportaron que más de 130 personas han muerto, decenas están desaparecidas en el sur del país y aproximadamente 12.000 han sido evacuadas. El desastre natural ha provocado inundaciones y corrimientos de tierra afectando principalmente a la isla de Mindanao.
Esta emergencia se presenta una semana después del paso de la tormenta tropical Kai-Tak que devastó el centro del país, dejando 54 muertos y 24 desaparecidos.
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Según prensa local, la tormenta entró el viernes en la isla meridional de Mindanao con vientos de más de 80 kilómetros por hora y con lluvias torrenciales que arrasaron las infraestructuras de una de las zonas más pobres del país. Las áreas más golpeadas son las provincias de Lanao del Norte, Zamboanga del Norte y Lanao del Sur, con 62, 46 y 18 muertos respectivamente.
Ante esta situación, la vicegobernadora de Lanao del Norte, Maria Cristina Atay, ha declarado el estado de calamidad en su región.
En el pueblo montañoso de Dalama, se registra uno de los suceso más graves pues según información local, la población de más de 2.000 habitantes habría quedado sepultado por un alud. Las autoridades de rescate continúan son las labores de búsqueda, no obstante, hasta el momento han sido encontrado 19 muertos de esa localidad.
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Asimismo, Trabajadores del servicio de emergencias, soldados, policía y voluntarios han sido movilizados a diferentes zonas del país para buscar supervivientes, limpiar los escombros y restablecer algunos de los servicios básicos caídos.
El servicio meteorológico PAGASA asegura que la tormenta ahora se dirige hacia el oeste y pasará por el mar de Sulu con vientos aún más fuertes en dirección a la isla de Palawan, uno de los destinos turísticos más reconocidos de Filipinas en los últimos años. Igualmente, PAGASA calcula que la tormenta habrá abandonado Filipinas entre el domingo y el lunes.
