El periodista Vester Lee Flanagan, autor del tiroteo ocurrido hoy en EE.UU. y que acabó con la vida de la periodista Alison Parker y su camarógrafo Adam Ward, falleció en un hospital de Virginia donde fue llevado tras intentar suicidarse.
Flanagan, conocido como Bryce Williams en los medios, murió en la clínica a la que fue trasladado por las autoridades después de que se iniciara su búsqueda tras el asesinato de sus excompañeros de la cadena WDBJ7 cuando informaban en directo, informó el alguacil del Condado de Franklin, Bill Overton.
En un principio, las autoridades habían informado del suicidio del autor del tiroteo, pero más tarde aclararon que este aún estaba con vida aunque gravemente herido cuando fue trasladado al hospital más próximo.
Overton indicó en la rueda de prensa que aún se desconocen los motivos concretos que llevaron a Flanagan a disparar contra sus excompañeros mientras estaban informando en directo para esa cadena filial de la CBS, sin embargo confirmaron que estuvo contratado en el canal durante al menos un año.
En el tiroteo también resultó herida la mujer a la que entrevistaba Parker, la directora ejecutiva de una cámara de comercio local Vicki Gardner, que se recupera en un hospital tras recibir un disparo en la parte trasera del cuello, aunque no se teme por su vida.
El presunto asesino se aproximó por detrás a los reporteros, de manera que sólo la entrevistada podría haberle visto y les disparó, según un video publicado en internet que supuestamente habría grabado el propio asesino y en el que puede verse su pistola.
En las imágenes que pudo grabar el camarógrafo antes de morir se oyen unos disparos, se nota cómo la cámara cae al suelo y rueda, mientras se oyen gritos hasta que finalmente queda interrumpida la emisión.
El presunto asesino habría publicado mensajes en las redes sociales Twitter y Facebook sobre el suceso minutos antes y después del mismo, aunque falta por confirmar la autenticidad de estas publicaciones, y sus cuentas fueron inmediatamente suspendidas.
Flanagan se disparó en la autopista I-66 a su paso por el condado de Faquier después de una búsqueda y persecución policial que se prolongó durante unas cinco horas y obligó a cerrar las escuelas del área y poner a la población en máxima alerta.