La Cámara de Representantes adjudicó mediante licitación un contrato por 4.400 millones de pesos para comprar los tiquetes aéreos de los congresistas durante los próximos cinco meses.
El contrato que, fue firmado el pasado 27 de julio con la empresa Subatours, estipula que la agencia deberá "suministrar los tiquetes aéreos de los honorables representantes a la Cámara en las rutas nacionales e internacionales en clase ejecutiva, con el fin de que puedan ser modificados en cuanto fecha, hora y destino”, según el punto dos del contrato firmado.
Subatours además ofreció 28 tiquetes mensuales y gratuitos a la Cámara a cualquier destino, pero en clase económica.
Uno de los puntos que más llamó la atención es que dichos tiquetes aéreos, al contrario de lo establecido en el plan de austeridad de gasto público que indica que "los viajes nacionales se harán solamente en clase económica", fueron separados en clase ejecutiva. Sin embargo, la directora administrativa de la Cámara de Representantes, Carolina Carillo, indicó que esa ley no los cobija y que el viaje de los legisladores debe ser en clase ejecutiva por los parámetros del Decreto 1083 de 2015.
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“La rama legislativa tiene una excepción ante esa ley porque no es lo mismo la dinámica de un funcionario público que la de un congresista que debe desplazarse a sus regiones, esto obliga a que se compren en clase ejecutiva y no estamos vulnerando esa ley”, explicó Carillo.
No es la primera vez que este tipo de licitaciones generan polémica en el Congreso. En 2015, la Cámara adjudicó un contrato de más de $14.000 millones por concepto de tiquetes aéreos para viajes de los congresistas durante 20 meses. La contratación se dio por tiquetes de ida y vuelta en semana de sesiones y uno por mes durante periodos de vacaciones, además de viajes exclusivamente en clase ejecutiva.
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Subatours también tiene un contrato con la Presidencia de la República para la realización de eventos. Aunque este había sido suspendido en el mes de julio y luego reanudado por la presunta vinculación de Subatours con Marketmedios, firma de la cual fue fundador Roberto Prieto, quien fue gerente de la campaña presidencial de Santos en 2014 y resultó involucrado en el escándalo de Odebrecht.
