La Corte Suprema de Justicia aprobó la norma que implementará en su reglamento y que cerraría el ingreso del magistrado Gustavo Malo a la corporación, tras ser uno de los implicados en el caso del cartel de la toga.
La norma le da facultad a la Sala Plena para relevar de sus funciones a todo trabajador o magistrado que este involucrado en un escándalo de corrupción o este en proceso de alguna investigación.
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“Con el fin de garantizar la imparcialidad, moralidad y ética y la función de administrar justicia. Para salvaguardar la legitimidad, la credibilidad y el buen nombre de la corporación, la sala plena por mayoría de las dos terceras partes de sus integrantes mediante votación nominal, previo a un trámite breve y sumario decidirá si lo releva de las actividades”, dijo el presidente de la sala penal, Rigoberto Echeverry.
Sin embargo, cabe precisar que en aras del derecho a la defensa, y bajo la ley, el magistrado Malo tendrá la posibilidad de ser escuchado para defenderse. Para remover a Malo de su cargo lo definen cinco magistrados y una votación de las dos terceras partes de la Sala Especializada de la cual haga parte el investigado.
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Gustavo Malo actualmente enfrenta una investigación en la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes, porque sería la persona que solicitó cambiar decisiones o archivar procesos delictivos de personas a cambio de altas sumas de dinero.
Malo seguirá defendiéndose de sus acusaciones por lo tanto estará devengando su salario mientras dure su proceso de investigación. El magistrado solicitó tres meses de licencia para defenderse de lo que le acusan. Regresaría el próximo 1 de diciembre, sin embargo, cabe la posibilidad que el togado solicite extender su licencia por otro mes porque la decisión de la Corte Suprema se conocería cuando Malo regrese a sus funciones.
