La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, anunció que promoverá en el segundo mandato que inició hoy un profundo ajuste fiscal para enderezar la desacelerada economía de Brasil, pero con bajos sacrificios para los más necesitados.
"Más que nadie sé que Brasil necesita volver a crecer y los primeros pasos para ello pasan por un ajuste fiscal y un aumento del ahorro público, pero haremos eso con el menor sacrificio posible para la población, en especial para los más necesitados", aseguró la mandataria en el discurso que pronunció ante el Congreso tras jurar el cargo para iniciar un segundo mandato de cuatro años.
La jefe de Estado, sin embargo, no dio más detalles sobre las medidas que pondrá en marcha a partir de este año para sanear las cuentas públicos y alcanzar un ahorro fiscal que mejore el ambiente para el crecimiento económico.
"Reafirmo mi compromiso con la manutención de todos los derechos laborales y de los derechos de la seguridad social", aseguró la mandataria al negar que las medidas de ajuste puedan afectar a los trabajadores.
Rousseff aseguró que es consciente de la necesidad de corregir distorsiones y excesos en la política fiscal, pero garantizó que lo hará demostrando la falsedad de la tesis según la cual la estabilidad económica no es compatible con la inversión social.
"Los cambios que el país espera para los próximos cuatro años dependen de la estabilidad y del crecimiento de la economía. Eso no es una novedad. Siempre orienté mis acciones para garantizar la estabilidad económica, el control de la inflación, la responsabilidad fiscal y la confianza de los inversores y de los trabajadores", dijo.
La presidenta dijo que, pese a las dificultades que sabe que tiene que enfrentar, la economía avanzó en su primer mandato y el país tiene que enorgullecerse de ser la séptima mayor economía del mundo, el quinto que más atrae inversión extranjera y el segundo mayor exportador agropecuario.
"La deuda líquida del sector público es menor que hace cuatro años; las reservas internacionales están en un nivel histórico, en cerca de 370.000 millones de dólares; la inversión extranjera alcanzó en los últimos años niveles récord y la tasa de desempleo es la menor ya vista. Generamos 5,7 millones de empleos formales en un período en que el mundo sufría desempleo", afirmó al resaltar los logros económicos de su gestión.
Rousseff también prometió nuevas medidas de incentivo a las pequeñas y medianas empresas y terminar con las diferencias tributarias "que hacen que el pequeño negocio tenga miedo de crecer".
A la investidura asistieron los presidentes de Bolivia, Chile, Costa Rica, Paraguay, Uruguay y Venezuela, así como los vicepresidentes de China, Estados Unidos, Argentina y el de Colombia, Germán Vargas Lleras.
EFE
Dilma Rousseff comienza su segundo mandato
Jue, 01/01/2015 - 09:52
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, anunció que promoverá en el segundo mandato que inició hoy un profundo ajuste fiscal para enderezar la desacelerada economía de Brasil, pero con bajos sac