Luego de que el pasado 29 de enero, la Agencia Nacional contra el Crímen-NCA (por sus siglas en inglés) del Reino Unido hallara un cargamento de 500 kilos de cocaína en lo que denominaron el 'narcojet', proveniente de Colombia, la prensa británica y la colombiana comenzaron a hablar del tema sin encontrar una respuesta concreta de cómo sucedió.
Y es que lo insólito del caso es que la aeronave fue cargada con 15 bolsos repletos del estupefaciente, con 37 ladrillos de cocaína, y logró despegar desde El Dorado en Bogotá. Por su parte, autoridades inglesas descubrieron que se trataba de un 'narcojet' luego de que los tripulantes no supieron explicar cómo hicieron para pagar el costo del vuelo, que ascendió a los 300.000 dólares.
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Las alarmas se prendieron al ver la profesión de los que habían pagado el viaje, que en Colombia se hicieron pasar por empresarios europeos: Dos ingleses implicados trabajan como albañiles, un italiano es asistente de chef, mientras que las otras dos personas son españolas, uno de ellos peluquero y el otro estaba desempleado.
Ahora, después de que los foráneos no lograran burlar la seguridad inglesa, las autoridades de Colombia y de Inglaterra están en contacto para compartir la información que ambos tienen y así establecer las responsabilidades de todos en el caso del 'narcojet'.
Desde Colombia, el director de la Policía, General Jorge Nieto, aclaró que en los hechos "se vulneró algún nivel de seguridad del aeropuerto El Dorado". Ante eso, aseguró que la entidad tiene en su poder imágenes y videos que ayuden a esclarecer los hechos.
Por su parte, una investigación publicada por El Tiempo informó de varias irregularidades en los controles de seguridad en Bogotá. En primer lugar, se esclareció que la requisa del 'narcojet' fue realizada por un hombre que se desplazó hasta el hangar, en una camioneta sin logos oficiales, además, al parecer el uniforme no era de su talla porque aparentemente le quedaba grande.
Además, el canino con el que hizo la supuesta requisa no es del tipo de raza que usan los de la brigada antinarcóticos.Sobre los dueños del jet, un funcionario antinarcótico de Colombia informó que la empresa Tyrolean Jet Services, los dueños de la aeronave, y Central Charter S.A, la prestadora del servicio, fueron víctimas de la red de narcotráfico, pero aseguró que dentro del hangar hubo cómplices que permitieron que se diera la situación. Ahora, la DEA y las autoridades europeas están a la espera de que Colombia entregue un informe detallado que pueda dar con la pista del grupo delictivo que vendió el cargamento a los extranjeros, que ya están capturados, y así poder aclarar este caso.
