Se dice que el estrés es la enfermedad del siglo XXI. Millones de personas en todo el planeta aquejan dolores de cabeza, no dormir bien, perder el apetito y muchas veces piensan que no deben preocuparse por los síntomas. El caso de Christina Ferrara, una mujer de 30 años, demostró que el cuerpo puede carcomerse por dentro sin dar la mayor muestra de preocupación.
La mujer estadounidense se volvió viral en las redes luego de contar su historia. Fue al médico por sangrados en la boca que atribuía al cepillo de dientes, irregularidades en la orina y otros factores que asoció al estrés. Iba cumplir 30 años y prefería no prestar atención a estas complejidades.
Sin embargo, una vez decidió asistir a un centro médico, la respuesta fue la menos esperada. Su hígado estaba desgastado con altos niveles de enzimas y el tiempo que había pasado consumía su cuerpo sin que ella viera la gravedad de la enfermedad. La internaron porque la muerte estaba a días de arrebatarle la vida.
Tenían que encontrar un donante para ella. Necesitaba otro hígado y, por fortuna, encontró un donante que le salvó la vida. Christina logró salvarse y continuar con sus metas.
Tras vivir los peores días de su vida, Ferrara muestra ahora en redes sociales el cambio que tuvo desde ese entonces. Se ve feliz y sonriente. Recomienda a las personas donar sus órganos y tener presente que es importante cuidar el cuerpo porque nadie está exento de sufrir una enfermedad de gravedad.
