Un no rotundo fue la segunda respuesta de la Corte Suprema de Justicia a la solicitud enviada por el ex líder guerrillero, Jesús Santrich, para que interviniera en su proceso de extradicción a los Estados Unidos. Lo anterior, luego de ser capturado el pasado 9 de abril por presunto narcotráfico después del acuerdo final firmado por el Gobierno Nacional y la antigua guerrilla de las Farc, ahora partido político, firmado en septiembre de 2016.
Santrich, luego de buscar varias alternativas para frenar su traslado a tierras norteamericanas por presuntamente haber enviado un avión con cocaína, decidió solicitarle a la Corte Suprema de Justicia que el juicio se adelantara con las autoridades competentes en el territorio nacional, argumentando que se le debe respetar el debido proceso y sus derechos como ciudadano.
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Asimismo, el exguerrillero señaló que no hay pruebas que demuestren que cometió algún tipo de delito en territorio estadounidense después del proceso de paz.
Sin embargo, la Sala de Casación Penal mencionó que esta petición es improcedente y que no es competente para estudiar el caso hasta que la Sala de Revisión de la Jurisdicción Especial para la Paz evalúe la conducta y el procedimiento apropiado teniendo en cuenta si los hechos ocurrieron antes o después de que entrara en vigencia el acuerdo pactado.
El alto tribunal señaló que si los actos delictivos fueron realizados antes del proceso de paz, esta solicitud será enviada a la Sala de Reconocimiento y el caso de Jesús Santrich estará en manos de la Justicia Especial. Sin embargo, en caso tal de que se lleguen a confirmar los cargos, Santrich deberá asumir la posibilidad de extradición.
Así pues, Santrich deberá estar a la espera de las declaraciones de la Sala de Revisión del Tribunal de Paz al evaluar su caso, ya que la Corte Suprema de Justicia fue clara al indicar que no intervendrá en este proceso hasta que no se realicen todos los trámites correspondientes.
