Se han confirmado 387 casos de personas enfermas de sarampión en lo corrido del 2019, en 15 estados de Estados Unidos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Esta cifra supera a la reportada durante todo el 2018 con un total de 372 casos y 17 brotes en el estado de Nueva York, la ciudad de Nueva York y Nueva Jersey, y es el segundo número más alto registrado desde que los funcionarios de salud de este país declararon que la enfermedad, altamente contagiosa y a veces mortal, fue "eliminada" en el 2000. Esta cifra más alta desde la eliminación fue de 667 en 2014.
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Los estados que reportan casos son: Arizona, California, Colorado, Connecticut, Georgia, Illinois, Kentucky, Michigan, Missouri, New Hampshire, Nueva Jersey, Nueva York, Oregon, Texas y Washington, según datos publicados por el CDC.
Muchos de esos brotes se originaron después de que personas no vacunadas viajaron a Europa, Filipinas e Israel, donde la infección es más común, y regresaron a los Estados Unidos después de contraer la enfermedad. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca de 83 mil personas contrajeron el sarampión en Europa en 2018, el número más alto en una década.
La semana pasada, en un esfuerzo por contener un brote de sarampión que comenzó en octubre, el condado de Rockland, Nueva York, prohibió que personas no vacunadas menores de 18 años de edad ingresaran a lugares públicos.
Hasta el viernes se habían reportado 153 casos en este condado. La prohibición, que estará vigente durante 30 días, provocó una reacción violenta de un pequeño grupo de defensores de la lucha contra la vacunación, quienes compararon la medida con la persecución nazi de judíos.
A nivel mundial, el sarampión es una preocupación importante. La OMS describe la enfermedad como una causa importante de muerte entre los niños pequeños, pese a contar con una vacuna eficaz, la vacuna MMR, que protege contra el sarampión, las paperas y la rubéola . Más de 110 mil personas, en su mayoría niños, murieron de sarampión en todo el mundo en 2017. La última muerte por sarampión registrada en Estados Unidos fue en 2015.
Los síntomas comunes del sarampión incluyen fiebre, secreción nasal, tos y una erupción que puede extenderse por todo el cuerpo. Un número muy pequeño de los infectados puede desarrollar neumonía, inflamación del cerebro u otros síntomas graves. El sarampión puede hacer que las mujeres embarazadas tengan un parto prematuro.
