La justicia de Brasil tiene como propuesta utilizar el estadio de Manaos, como una cárcel provisional luego de la Copa Mundo de 2014. El campo que será una de las sedes del evento, se ubica al norte del país. La medida intenta hacerle frente al hacinamiento que viven hoy por hoy las prisiones brasileñas.
La idea es que el estadio, que tiene capacidad para 44.000 espectadores, sea una especia de primera parada para los presos, mientras se define el sitio de reclusión definitivo. La medida toma fuerza debido a que la ciudad de Manaos no tiene ningún equipo en la primera división del fútbol de ese país. La inversión total para la construcción del escenario fue de 280 millones de dólares.
Sede del mundial podría convertirse en una cárcel
Mié, 25/09/2013 - 13:55
La justicia de Brasil tiene como propuesta utilizar el estadio de Manaos, como una cárcel provisional luego de la Copa Mundo de 2014. El campo que será una de las sedes del evento, se ubica al norte