En un evento celebrado en Nueva York, la embajadora de Colombia, María Emma Mejía, en nombre del Gobierno de Colombia, y Jeffrey Feltman, Subsecretario General para Asuntos Políticos, en nombre de la Organización de Naciones Unidas, firmaron el acuerdo “Estatuto de Acuerdo de Misión”.
En este documento (en inglés - Status of Mission Agreement – SOMA) se fija el establecimiento y funcionamiento de la segunda Misión Política Especial de Naciones Unidas en Colombia aprobada por el Consejo de Seguridad de este organismo internacional el pasado 10 de julio.
Si en la primera misión el objetivo fue la verificación del cese al fuego y la dejación de armas por parte de las Farc, en la segunda el propósito es verificar el proceso de reincorporación política, económica y social de los excombatientes de esa guerrilla, y el cese al fuego con el ELN.
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En el marco de la firma, el Subsecretario General indicó: "las Naciones Unidas esperan continuar con el papel constructivo que han tenido hasta ahor" acompañando la implementación del Acuerdo de Paz entre el Gobierno colombiano y las Farc a la vez que señaló, con relación a la verificación del cese al fuego temporal y bilateral con el ELN, que confía en que contribuya a crear una "atmósfera para un acuerdo más permanente" con ese grupo.
Feltman afirmó que, debido a la naturaleza de las resoluciones del Consejo de Seguridad el mandato de la Misión de Verificación trasciende a lo que ocurra con los cambios de Gobierno, y confía en contar "con el mismo tipo de relación constructiva" con una futura administración.
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Por su parte, la embajadora Mejía agradeció a las Naciones Unidas por el apoyo brindado a Colombia y destacó que existe una confianza total de la comunidad internacional en la implementación de las siguientes fases del proceso.
Garantías de seguridad, punto fundamental
En esta segunda etapa, los alcances de la verificación que realizará la misión de la ONU tienen que ver con las garantías de seguridad y la reincorporación de los integrantes de las Farc, factor de importancia para crear confianza en el proceso.Esta misión contará con 70 observadores para monitorear el cese al fuego bilateral y temporal con el ELN, y 450 observadores, entre civiles y militares, para la Verificación del Acuerdo de Paz con las FARC.A diferencia de la primera misión, que contaba con un mecanismo tripartito, esta es enteramente de las Naciones Unidas y tendrá un costo de 73.5 millones de dólares. El SOMA es un documento de carácter jurídico, que establece el marco legal entre Colombia y las Naciones Unidas para el funcionamiento de la misión y el cumplimiento de su mandato. Este documento se traduce en el piso jurídico para continuar el trabajo conjunto entre la organización y el país en la construcción de una Colombia en paz.
