Vaya partido dieron Junior y Pasto en la noche del Metropolitano de Barranquilla. El conjunto Tiburón tuvo servida la cena para llegar a la punta del torneo e hizo todos los méritos para alcanzarla, pero el arquero Lucero Álvarez del conjunto nariñense se robó el show hasta qué...
La posesión de la pelota favoreció a Junior en todo momento y con ella en su poder tuvo la paciencia en el primer tiempo para enfrentar al arquero rival que no dio grietas, incluso atajó un penal que de manera extraña pateó el defensor Correa en demerito de Martín Arzuaga que a priori era el indicado de cobrar.
El segundo tiempo mostró a un Junior más enérgico que tuvo opciones por doquier pero sin éxito por la puntería de los delanteros y por la gran actuación de Álvarez. La expulsión del volante Pinzón hizo que los locales se abalanzaran aún más sobre el arco de Lucero pero este se mostró imbatible.
Entonces, cuando el partido moría, una mala salida de la defensa pastusa fue aprovechada primero por Arzuaga, que con gran pase habilitó a Vladimir Hernández que enfrentó a un desesperado guardameta que salió del área grande donde fue invencible y con algo de suerte y otro poco de técnica, el pequeño la mandó a guardar para subir a Junior a la punta, lejos del Lucero pero más cerca de las estrellas.
