El Centro Democrático afirmó este lunes que tras 1.000 días de negociaciones de paz en La Habana las Farc ha aumentado los atentados, la extorsión y los retenes ilegales, entre otros.
El balance fue presentado en Bogotá, donde representantes de esta formación aseguraron que los diálogos de Cuba, desarrollados "en medio de la violencia y el terror", han tenido un costo "inmenso" para Colombia.
"Durante estos mil días de violencia la seguridad se ha deteriorado, la confianza inversionista se ha reducido y el pesimismo de los colombianos se ha incrementado", resumió el partido en un comunicado.
El Centro Democrático, fundado por el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), siempre ha mantenido una postura crítica con relación a los diálogos entre el Gobierno colombiano y las Farc que hoy volvió a verse reflejada en un balance en el que abundaron las cifras negativas.
Por ejemplo, destacaron que si se compara 2010 (cuando los diálogos estaban en fase exploratoria) con 2014 (segundo año de conversaciones), en los pasados doce meses "aumentaron los atentados contra la infraestructura petrolera en 355 %, la extorsión en 262 %, y los ataques a instalaciones militares 111 %".
También crecieron, según los uribistas, un 69 % los hostigamientos contra la Fuerza Pública, un 64 % los retenes ilegales 64 % y un 62 % "los actos de terrorismo".
El Centro Democrático alertó que durante estos 1.000 días la guerrilla ha realizado "al menos 1.024 acciones violentas consistentes en 417 ataques contra la Fuerza Pública, 233 actos de terrorismo, 194 ataques contra la infraestructura económica y 180 retenes ilegales".
Todo ello, agregan, en 25 de los 32 departamentos de Colombia, siendo las regiones más afectadas Cauca, Antioquia, Putumayo y Nariño (suroeste).
"En medio de esta creciente violencia, en estos mil días las FARC han asesinado a cerca de 700 miembros de la Fuerza Pública y a 148 civiles, han secuestrado a 70 civiles y a 10 miembros de la Fuerza Pública, y han sido heridos 1.651 miembros de la Fuerza Pública y 148 civiles", agregó el partido en su informe.
Con respecto de los cultivos de coca, el uribismo, que criticó la suspensión de las aspersiones del potente herbicida glifosato, que puede ser nocivo para la salud, afirmó que el área cultivada aumentó entre 2013 y 2014 "en todo el país".
Como consecuencia, "la producción potencial de cocaína pasó de 185 toneladas a 245 toneladas", un ascenso que relacionan con "la caída de las fumigaciones y de las erradicaciones de coca durante los diálogos de paz en Cuba".
*Con información de la Agencia EFE
