Este jueves, siguiendo con el inicio de los procesos de verdad que están en marcha en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), respecto al caso 001, referente a los secuestros políticos perpetrados por las Farc, fue el turno de Clara Rojas para que expresara su testimonio e informe ante los magistrados del tribunal.
Rojas no solo relató la "agonía e ignominio" de su prolongado secuestro, sino que intentó referirse a los culpables que deberían reconocer su responsabilidad y aportar en términos de verdad para que víctimas como ella puedan sanar sus heridas. Rojas consideró que hay en general tres líneas de perpetradores de su secuestro.
"Desde mi punto de vista es claro que hay una responsabilidad enorme por parte de todos los miembros del secretariado (de Farc). Hay un instructivo que asumieron en la conferencia y que le dieron a sus comandantes. La organización en general tenía conocimiento de esta práctica (secuestro). En segundo lugar fueron los comandantes que van rotando y que dirigían los centros de detención que ellos tenían. No me sé todos los alias de ellos. Pero también los mismos guardias hay momentos en que son duros. Finalmente son ellos los que dan la comida y los suministros, los que siguen la situación de las personas. Así como hay quienes no molestan, otros sí. Por lo que hay que ver casos concretos", dijo.
En ese sentido, Rojas aseguró que existen numerosos matices, puesto que no todos los guerrilleros, por lo menos en su caso, le dieron mal trato sino que hubo quienes en medio de tan nefasta situación expresaron humanidad: "Quise registrar el tema de la atención positiva que tuve al momento en que nació mi hijo. No me esperaba esa situación y me pareció increible que me pudieran ayudar en esos momentos. Pero sin duda hubo otros que fueron duros".
La exrepresentante a la Cámara agregó que lo fundamental es que los miembros y líderes de las Farc reconozcan su responsabilidad en el tema del secuestro de manera individual, algo que no ha ocurrido todavía.
"Cada persona tiene un dolor propio, a pesar de que vivimos cosas muy semejantes. Pero sin duda para todos es muy importante que las Farc reconozcan que causaron este delito y que hubo muchas víctimas objeto del secuestro. Que pidan perdón y que se comprometan a que esta práctica nunca vuelva a ocurrir. Yo creo que esa debe ser una lección en Colombia. Por más de que no nos entendamos en muchos aspectos no podemos caer tan bajo para permitir una práctica como el secuestro", argumentó.
