El reto de la seguridad
Para el experto, el desafío sigue siendo reemplazar la autoridad criminal que tenían ahí las Farc por la del Estado. "Tiene que llegar la institucionalidad allá, y además lograr que los ciudadanos de esas regiones respeten su autoridad. En su discurso, Duque señaló esa problemática: la legitimidad del Acuerdo de Paz no existe aun. La importancia ahora es que el acuerdo se vuelva legítimo y empezar a construir institucionalidad". "¿Por qué es necesario? En esas zonas se presenta el denominado fenómeno de convergencia: Insurgencia, que ahora es el Eln y las disidencias de Farc, más autodefensas como el Clan del Golfo, más el crimen organizado (que son fundamentalmente carteles mexicanos y el cartel de los soles), coparon esas zonas de gran valor geopolítico para Colombia, generando vacíos de institucionalidad y control territorial. Sumado a que en esas zonas hay abundancia de riqueza extractiva", agregó Sahid. Por tanto, el reto de Duque respecto a las regiones es llevar allá la institucionalidad fundamentalmente a esas tres regiones, y no se trata solo de enviar militares y policías. "Es la institucionalidad política, económica, social y cultural. Esa falta de Estado frena las soluciones a diversos problemas que aquejan a esas zonas", consideró el experto. También existe una falla estructural del Estado colombiano en el modo como se ha aproximado a las problemáticas de dichas regiones: "siempre ha visto los asuntos de las zonas marginadas como fenómenos aislados. Un tema para él es mineria ilegal, otro es narcotrafico, otro es cultivos, mientras que lo ideal sería ver estos fenómenos desde una perspectiva macro, porque todos están vinculados. La convergencia también tiene un papel ahí: ¿Quién maneja a los mineros ilegales? Eln y las disidencias de Farc, ¿quién extrae el oro? Clan del Golfo, ¿y quién lo trafica? los narcotraficantes. Es decir que el fenómeno criminal está todo interconectado, mientras que el Estado no ataca la estrategia en común de estos grupos".Economía legal, motor necesario de las regiones
En el fondo para Sahid, el reto para cualquier gobierno que como el de Duque quiera ampliar su presencia en las regiones es "quitar a los bandidos el monopolio de las armas y el de los impuestos. Curiosamente en esas zonas las ciudadanías los legitiman porque son ellos los que también cumplen funciones que en realidad le corresponden al Estado". En este sentido, reemplazar las economías criminales por modelos productivos legales, que dejen beneficios perdurables a esas zonas debe ser un mandato a seguir si se quiere reforzar la institucionalidad allí. En eso concuerda el General (R) de la Policía Javier Delgado, experto en seguridad y postconflicto: "Si bien el anterior mandatario trató de hacerlo, el actual intentará consolidar definitivamente esa idea y hacer una realidad el tan esperado Gobierno de las regiones. Esto tiene sentido por lo que representa para las instituciones, el hecho de gobernar desde ellas y el significado de descentralizar la gestión ejecutiva", dijo. "Son dos aspectos que se deben tener en cuenta. En primer lugar el de reconocer que hay una recaída de la seguridad, y reestructurar la institucionalidad en ese sentido. Pero la causa principal de esa recaida es el narcotráfico, y por ese motivo a las economías criminales hay que reemplazarlas por un aparato productivo distinto. Ya vendrán las ofertas del estado en términos de otros tipos de economías que sean viables y que permitan ir desarrollándo verdaderos espacios de participación para los habitantes de esas zonas", explicó. [single-related post_id="916897"] No obstante, en opinión de Giovanni Reyes, Phd en Economía de la Universidad de Pittsburgh, reemplazar por completo las economías criminales en las regiones supone un reto muy difícil de solucionar a cabalidad. El experto dio dos razones: "Si eso se logra sería tras un decisivo cambio estructural en el Estado, porque en general la condición de la infraestructura institucional tiende a ser débil en Colombia. Eso requiere un cambio rotundo para llegar de forma efectiva al medio rural. Pero también hay un factor que debe tener en cuenta Duque, que es la lucha contra la corrupción. En un escenario en el que ya hay pocos recursos, pero que estos se utilicen mal, su objetivo quedaría liquidado. Las cosas se hacen con los recursos, y quedarían bastante si se controla la corrupción, pero extirpar ese asunto es muy complicado", argumentó. Por otra parte, y no menos importante, está el hecho de que sentenciar economías criminales como el narcotráfico resulta imposible en lo local si no se coordina una estrategia efectiva en el escenario mundial. "Si se evita la producción en Colombia y en Perú, pero si se mantiene sigue la demanda en el norte (Estados Unidos y Europa), esa oferta seguirá manteniéndose, por muchos esfuerzos que se hagan dentro del país", afirmó. "Hay que incidir en las decisiones económicas que toma la gente. Y la gente en las regiones toma constantemente decisiones económicas. ¿Produzco piñas que tienen mucho peso en agua y requieren vías para sacarlas o produzco coca que me la vienen a comprar aquí? De momento la única opción para los campesinos de esas zonas es la segunda", agregó. Brindar una propuesta económica que satisfaga las necesidades y expectativas de esa población debe ser por tanto prioridad si se quiere llevar realmente el Estado a esas regiones.El postconflicto es todavía clave
Por último, el General (R) Delgado consideró que Duque todavía deberá defender las banderas de la implementación de los acuerdos de paz con Farc como parte de la estrategia de acercamiento del Estado a las zonas más marginadas del país. "Hay unos avances en el ámbito de las desmovilización, entrega de armas, y la participación política. Esto ya es valorado por la comunidad internacional y amerita por tanto el seguimiento por parte de su Gobierno", dijo. Esto no deja de implicar que "el trámite de los ajustes que ha prometido el uribismo centrará muchos de los esfuerzos de Duque. No considerar el narcotráfico y secuestro como delitos conexos será una transformación substancial", pero conservar lo ya avanzado ayudará a impulsar el propósito analizado en este artículo.“Tenemos que devolverle el valor a la palabra del Estado. La creación desordenada de agencias y programas está acrecentando la desconfianza ciudadana y la frustración de los beneficiarios de estas iniciativas, incluidas las víctimas y las regiones golpeadas por la violencia”Duque
— Paola Holguín (@PaolaHolguin) 8 de agosto de 2018
¡Desde ya en las regiones, como debe ser! Con nuestro Presidente @IvanDuque en su primer viaje de Gobierno en San Andrés. ¡Vamos a llegar a todo el país! #ElFuturoEsDeTodos pic.twitter.com/8D2Ef8TGas
— Karen Abudinen (@karenabudi) 8 de agosto de 2018
@FNDCol pide a @IvanDuque trabajar en Plan de Desarrollo que permita integrar visión de las regiones, profundice autonomía territorial y avanzar en equidad, desarrollo, infraestructura, educación, salud, agroindustria, vivienda y medio ambiente https://t.co/XtrLwwVIOI #Duque pic.twitter.com/UU7kJXU4X8
— Noticias al Sur (@Noticiasalsur1) 8 de agosto de 2018