El Parlamento británico aprobó este miércoles por la noche un proyecto de ley que obliga a la primera ministra Theresa May a buscar un nuevo aplazamiento a la salida del Reino Unido de la Unión Europea para evitar un escenario sin acuerdo.
La legislación, también conocida como Ley Cooper (por ser una propuesta de la parlamentaria laborista Yvette Cooper), fue sometida a una apretada votación que finalmente fue aprobada por tan solo un voto de diferencia, 313 contra 312.
En solo seis horas, el proyecto de ley fue apresurado a través de todas sus etapas, esto con la aprobación del presidente del Parlamento, John Bercow.
Sin embargo, tendrá que ser aprobado por la Cámara de los Lores, y la extensión también tendrá que ser aprobada por la UE la próxima semana.
Las minucias
La medida se produjo el mismo día que la primera ministra Theresa May y el líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, se reunieron para discutir ideas que puedan poner fin al impasse del brexit.
Los dos líderes reanudarán las conversaciones sobre el brexit el jueves, después de que tanto el gobierno como el Partido Laborista describieran las conversaciones iniciales como "constructivas".
"Hemos tenido discusiones exploratorias constructivas sobre cómo romper el punto muerto del brexit", dijo un portavoz de Trabajo.
"Acordamos un programa de trabajo entre nuestros equipos para explorar el alcance del acuerdo. Presenté el plan alternativo de los laboristas y planteé la opción de una votación pública para evitar un escenario sin acuerdo o una retirada con un mal acuerdo", escribió Corbyn en Twitter.
"No hubo tantos cambios en su posición como esperaba, pero tendremos más discusiones mañana", agregó el líder laborista.
Sin embargo, Corbyn también se vio presionado por su propio partido para plantear con May una "votación pública confirmatoria" sobre cualquier acuerdo al que se pueda llegar.
El Partido Nacional de Escocia (SNP) también expresó su demanda de un referendo confirmatorio.
Las conversaciones de May con Corbyn recibieron reacciones de sus propios parlamentarios conservadores, que defendieron una retirada inmediata sin acuerdo en lugar de una versión más suave del brexit.
Dos ministros subalternos renunciaron al gobierno este miércoles en respuesta a la última estrategia de la líder británica.
Cuenta regresiva
Con tan solo 10 días para que se cumpla la fecha en que Reino Unido abandone la Unión Europea, May sostuvo este martes que se requiere que el bloque le conceda una extensión adicional para evitar un divorcio sin acuerdo.
"Hoy estoy tomando acciones para romper el bloqueo: ofrezco sentarme con el líder de la oposición e intentar acordar un plan (al cual los dos nos adherimos) para garantizar que abandonemos la Unión Europea y que lo hagamos con un acuerdo”, propuso May dirigiéndose al líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn.
"Cualquier plan tendría que ir en línea con el actual Acuerdo de Retiro; ya se ha negociado con los otros 27 estados miembros y la UE ha dicho en repetidas ocasiones que no puede y no será abierto de nuevo".
De acuerdo con May, "el resultado ideal de este proceso sería acordar un enfoque sobre las relaciones futuras que cumpla con el resultado del referendo", y que tanto el líder de la oposición como ella misma puedan presentar a la Cámara de los Comunes para que sea aprobado y que de esa manera pueda ser llevado a la próxima sesión del Consejo Europeo, que se llevará a cabo este 10 de abril.
Los ciudadanos del Reino Unido participaron en un referendo en junio de 2016 en el que decidieron que querían que su país se retirara de la Unión Europea, poniendo fin a la membresía británica de cerca de 40 años en el bloque.