Según estadísticas de la Organización de la Naciones Unidas (ONU), el 35% de las mujeres y niñas en el plantea sufren alguna forma de violencia física o sexual a lo largo de sus vidas. En algunos países esta cifra asciende al 70%.
En el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer, Kienyke.com quiere resaltar el papel de una cartagenera, gestora social y cultural del departamento de Bolívar, quien se ha puesto la camiseta para generar una campaña en contra de la violencia de género.
Se trata Ana Elvira Gómez, esposa del gobernador del departamento de Bolívar Juan Carlos Gossain. Es la promotora de la iniciativa #NiunaMás, que exige el cese de todo acto que vulnere los derechos de las mujeres.
Fue la impulsora de la III Maratón en contra de la violencia de género, donde cerca de 4.000 personas salieron a marchar.
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En esta oportunidad, los hombres fueron los protagonistas pues lideraron la campaña marchando desde las playas de Marbella hasta la Plaza de la Proclamación, en el centro histórico de la Heroica, donde dejaron en claro su rechazo total contra el maltrato de género.
-¿Cómo y cuándo nace la iniciativa #NiUnaMás?
-#NiUnaMás nace hace tres años, cuando empecé a recorrer el departamento de Bolívar junto al gobernador Juan Carlos Gossain. Nos dimos cuenta que la violencia de género en el mundo rural del departamento es vista como una situación normal. Me impactó muchísimo porque no se estaba denunciando; no se estaba visualizando el problema sino que se convivía con él como si fuera algo normal. Además hubo un caso aquí en Cartagena que nos conmovió mucho: una estudiante universitaria fue quemada por su novio. ¡Fue un caso terrible! Esto nos sensibilizó a todo el equipo, y propusimos esta campaña con el objetivo de que denuncien los casos, que no se queden calladas.
En video: Ana Elvira de Gossaín cuenta las razones por las que impulsó la campaña #NiUnaMás
[youtube]http://youtu.be/IP15mkUzNu8[/youtube]
-El domingo lideraron la maratón cerca de 2.000 hombres en contra de la violencia de género, la campaña fue llamada #EllosPorEllas ¿Por qué quiso unir a los hombres en esta causa?
-Nosotros no queríamos salir y decirle a los hombres: “¡Por favor no golpee más a las mujeres!”. Queríamos hablarles a las mujeres para que se empoderaran, para que entendieran que la autonomía de tomar decisiones es de nosotras mismas. Por eso, una vez las mujeres empezaron a denunciar, se nos ocurrió decir: si los hombres son parte del problema, que sean también parte de la solución. Por eso dijimos que caminen ellos por ellas, que haya un compromiso de parte de los hombres, que todos aquellos quienes no son maltratadores se solidaricen con nosotras y con las mujeres víctimas de violencia, para que también griten #NiUnaMas
-¿Cuál es el caso de violencia contra el género que más haya conmocionado en el departamento del Bolívar?
-Hay muchos casos que nos han impactado mucho pero no se han dado a la luz pública, porque no queremos revictimizarlas. Son sobrevivientes de esa violencia, sobrevivientes dentro de la violencia del departamento y sobrevivientes dentro de la violencia del país y de la violencia de género. Son mujeres que han sufrido muchísimo y que cuando conocemos sus casos lo que intentamos es ayudarlas. Hay casos en los cuales hay mujeres que han sido mutiladas por esos violadores porque al intentar defenderse le hicieron algún rasguño al violador, entonces por represalia estos violadores le cortaron las manos. Hay casos terribles que arrugan el corazón.
-¿Qué nos puede decir en cuanto a las cifras que manejan ustedes de este delito, tanto en violencia doméstica y la causada por conflicto armado?
En ninguno de los dos casos me atrevo a decir que son cifras confiables, porque no siempre se denuncian. Si no hay denuncias, no tenemos una formación confiable. A partir de que se creó el programa #NiUnaMás y el Observatorio del Delito del departamento del Bolívar. Ese observatorio ha trabajado con medicina legal, con las alcaldías y con las Comisarias de Familia. Estamos logrando tener unas estadísticas confiables, y puedo decir que se han triplicado esas denuncias.
“En Twitter alguien me escribía que no era necesario gritar, y pensé en ese momento: a Colombia le falta poesía y le sobran balas, este es un grito del alma y de rabia. Al principio era de impotencia y de rabia y hoy en día es un grito de esperanza, y mucho más cuando son los hombres los que se unen”.
-¿Cómo analiza la forma cómo se está abordando el tema de violencia contra la mujer en el Proceso de Paz en Cuba?
Creo que la inclusión de Jineth Bedoya en la mesa de negociación como víctima hace que el tema se toque. Como son secretas las conversaciones no sabemos la dimensión que se le dará. Yo quisiera que se tocara como uno de los temas claves de la reconciliación. Las mujeres no solamente necesitamos que se nos diga que hay una restitución de tierras, o que hay un perdón generalizado; lo que necesitamos es que haya un arrepentimiento y una declaración de perdón a las mujeres víctimas de violencia de género.
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-¿Por qué cree que a las mujeres les da miedo denunciar este tipo de atropellos?
-Inicialmente por la falta de autonomía económica, por no tener seguridad financiera. Da temor cuando tienes hijos porque ¿con qué me quedo? y ¿Con qué los mantengo? y eso te obliga, de cierta forma, y te condena a seguir en ese círculo de violencia. Yo creo que la razón es cultural; nos hemos ido acostumbrando un poco el temor. En países como España el problema se agrava cada día más y se agrava dentro de la gente joven; yo no sé que tanto esta vida acelerada que llevamos nos hace sentir solos y con tal de tener una compañía llegamos hasta aceptar eso.
-¿Qué herramientas le da estas mujeres para que eviten este tipo de maltrato?
Definitivamente la formación e información y esto que estamos haciendo con #NiUnaMás. Adicionalmente el poder generar proyectos productivos para las mujeres, el que tengan la posibilidad de generar ingresos y que se involucren en la vida económica de la sociedad actual, porque la mujer rural trabaja, lo que pasa es que no tiene una compensación económica.
-¿Qué otras campañas lidera usted en este tipo de temas?
La maratón es lo visible, pero el programa tiene la iniciativa ‘Vive sin tirar tus sueños’, que está ligada a una sexualidad sana desde la infancia. Si tú quieres tu cuerpo y respetas tu sexualidad, cuando eres adulto puedes evitar el abuso y el maltrato. Hay una campaña dirigida a los niños y niñas que la implementa la Secretaria de Salud del departamento que se llama ‘Escucha lo que digo’ y está orientada a formar a maestros y padres para que cuando los niños les den una alarma de que algo no está bien, inmediatamente se comuniquen con el ICBF.
-¿En qué estrato social es más frecuente el tipo de maltrato contra las mujeres?
Cuando empezamos hacer el levantamiento de información encontramos que no había una concentración ni por grupos etarios ni socioeconómico. Se ve en todos. Yo creo que ha pasado el tiempo y tenemos algo claro y es que las mujeres rurales denuncian menos. Eso se debe a se han acostumbrado a ver todo el maltrato como algo normal.
-¿Cuáles son los resultados que ha tenido la campaña #NiunaMás?
En cuanto a los resultados hay dos vías, uno es el que se percibe y el otro el que está en las estadísticas. El que se percibe es que a ese problema no lo seguimos escondiendo; que la violencia de género existe; que es un problema gravísimo sino que ya lo hablamos. Hemos logrado trabajar con 50.000 jóvenes sobre sexualidad para aplazar la edad de primer embarazo, para que los jóvenes respeten su cuerpo y respeten sus relaciones sexuales. Hemos logrado que en todos los municipios haya comisarias de familia, que antes no existían.
“Tenemos a muchos hombres apoyándonos. Tenemos la esperanza de que Bolívar va a ser no solo un territorio libre de violencia de la guerra, sino libre de la violencia de género”.
-¿Cómo es el proceso de reconciliación entre víctimas y victimarios?
Hay una Secretaría de Víctimas. Bolívar fue el segundo departamento de Colombia donde se logró trabajar de la mano con las víctimas. Creo que nosotros estamos esperando lo que suceda en la mesa para poder hacer la reconciliación entre víctimas y victimarios. Por lo pronto estamos trabajando con las víctimas únicamente, por ellas y para ellas, generando procesos productivos, ayudándolas a organizar y a que se informen.
-¿La justicia es eficaz a la hora de actuar en estos casos?
-Estamos trabajando para que así sea. La Fiscalía, la Procuraduría, los jueces han tenido una participación activa; han acogido esta campaña. Nosotros trabajamos con la Policía, El Ejército y la Armada, porque solos no podemos hacerlo; necesitamos que todos trabajemos y en este caso lo estamos haciendo.
-¿Por qué usted le apuesta a este tipo de campaña?
-Porque es inconcebible: la humanidad entera ha luchado por la equidad de género y todavía en el siglo XXI no tenemos lo básico que es el respeto entre los seres humanos. Si ya de por sí la violencia es terrible y acaba con la humanidad, la violencia de género es más vil. Creo que hay que trabajarlo y lucharlo y alguien tiene que hacerlo. Aquí tuve la oportunidad de hacerlo siendo la esposa del Gobernador, porque eso me da el privilegio de que mi voz se oiga más que la de otras mujeres.
“En Twitter alguien me escribía que no era necesario gritar, y pensé en ese momento: a Colombia le falta poesía y le sobran balas, este es un grito del alma y de rabia. Al principio era de impotencia y de rabia y hoy en día es un grito de esperanza, y mucho más cuando son los hombres los que se unen”.
-¿Cómo analiza la forma cómo se está abordando el tema de violencia contra la mujer en el Proceso de Paz en Cuba?
Creo que la inclusión de Jineth Bedoya en la mesa de negociación como víctima hace que el tema se toque. Como son secretas las conversaciones no sabemos la dimensión que se le dará. Yo quisiera que se tocara como uno de los temas claves de la reconciliación. Las mujeres no solamente necesitamos que se nos diga que hay una restitución de tierras, o que hay un perdón generalizado; lo que necesitamos es que haya un arrepentimiento y una declaración de perdón a las mujeres víctimas de violencia de género.
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-¿Por qué cree que a las mujeres les da miedo denunciar este tipo de atropellos?
-Inicialmente por la falta de autonomía económica, por no tener seguridad financiera. Da temor cuando tienes hijos porque ¿con qué me quedo? y ¿Con qué los mantengo? y eso te obliga, de cierta forma, y te condena a seguir en ese círculo de violencia. Yo creo que la razón es cultural; nos hemos ido acostumbrando un poco el temor. En países como España el problema se agrava cada día más y se agrava dentro de la gente joven; yo no sé que tanto esta vida acelerada que llevamos nos hace sentir solos y con tal de tener una compañía llegamos hasta aceptar eso.
-¿Qué herramientas le da estas mujeres para que eviten este tipo de maltrato?
Definitivamente la formación e información y esto que estamos haciendo con #NiUnaMás. Adicionalmente el poder generar proyectos productivos para las mujeres, el que tengan la posibilidad de generar ingresos y que se involucren en la vida económica de la sociedad actual, porque la mujer rural trabaja, lo que pasa es que no tiene una compensación económica.
-¿Qué otras campañas lidera usted en este tipo de temas?
La maratón es lo visible, pero el programa tiene la iniciativa ‘Vive sin tirar tus sueños’, que está ligada a una sexualidad sana desde la infancia. Si tú quieres tu cuerpo y respetas tu sexualidad, cuando eres adulto puedes evitar el abuso y el maltrato. Hay una campaña dirigida a los niños y niñas que la implementa la Secretaria de Salud del departamento que se llama ‘Escucha lo que digo’ y está orientada a formar a maestros y padres para que cuando los niños les den una alarma de que algo no está bien, inmediatamente se comuniquen con el ICBF.
-¿En qué estrato social es más frecuente el tipo de maltrato contra las mujeres?
Cuando empezamos hacer el levantamiento de información encontramos que no había una concentración ni por grupos etarios ni socioeconómico. Se ve en todos. Yo creo que ha pasado el tiempo y tenemos algo claro y es que las mujeres rurales denuncian menos. Eso se debe a se han acostumbrado a ver todo el maltrato como algo normal.
-¿Cuáles son los resultados que ha tenido la campaña #NiunaMás?
En cuanto a los resultados hay dos vías, uno es el que se percibe y el otro el que está en las estadísticas. El que se percibe es que a ese problema no lo seguimos escondiendo; que la violencia de género existe; que es un problema gravísimo sino que ya lo hablamos. Hemos logrado trabajar con 50.000 jóvenes sobre sexualidad para aplazar la edad de primer embarazo, para que los jóvenes respeten su cuerpo y respeten sus relaciones sexuales. Hemos logrado que en todos los municipios haya comisarias de familia, que antes no existían.
“Tenemos a muchos hombres apoyándonos. Tenemos la esperanza de que Bolívar va a ser no solo un territorio libre de violencia de la guerra, sino libre de la violencia de género”.
-¿Cómo es el proceso de reconciliación entre víctimas y victimarios?
Hay una Secretaría de Víctimas. Bolívar fue el segundo departamento de Colombia donde se logró trabajar de la mano con las víctimas. Creo que nosotros estamos esperando lo que suceda en la mesa para poder hacer la reconciliación entre víctimas y victimarios. Por lo pronto estamos trabajando con las víctimas únicamente, por ellas y para ellas, generando procesos productivos, ayudándolas a organizar y a que se informen.
-¿La justicia es eficaz a la hora de actuar en estos casos?
-Estamos trabajando para que así sea. La Fiscalía, la Procuraduría, los jueces han tenido una participación activa; han acogido esta campaña. Nosotros trabajamos con la Policía, El Ejército y la Armada, porque solos no podemos hacerlo; necesitamos que todos trabajemos y en este caso lo estamos haciendo.
-¿Por qué usted le apuesta a este tipo de campaña?
-Porque es inconcebible: la humanidad entera ha luchado por la equidad de género y todavía en el siglo XXI no tenemos lo básico que es el respeto entre los seres humanos. Si ya de por sí la violencia es terrible y acaba con la humanidad, la violencia de género es más vil. Creo que hay que trabajarlo y lucharlo y alguien tiene que hacerlo. Aquí tuve la oportunidad de hacerlo siendo la esposa del Gobernador, porque eso me da el privilegio de que mi voz se oiga más que la de otras mujeres.
