Como un "suicidio económico" se refirió el presidente Gustavo Petro al aumento de salarios altos en el sector público en 2024. Esto como consecuencia de la decisión que tomó la Corte Constitucional para tumbar un parágrafo de la reforma tributaria en el que se prohíbe la deducción de regalías de la base gravable del impuesto de renta de las empresas dedicadas a la exploración y explotación de recursos naturales no renovables.
En el vigésimo congreso de la Cámara Colombiana de Infraestructura el mandatario hizo el anuncio y especificó que el Gobierno tendrá que buscar 6,5 millones de pesos.
Además de no subir los sueldos de los funcionarios públicos, el presidente dio otras dos alternativas: recortar gastos de funcionamiento y posibles aplazamientos de inversiones menos prioritarias.
No queremos golpear la inversión, lo que está aprobado por en el Congreso de la República, y nos toca ir al funcionamiento no ir a la deuda, nos toca es pagar la deuda. Y funcionamiento básicamente es ir a ejército y policía, y tocamos una vértebra, y no da para recuperar los $6,5 billones.
Eso sí, pidió no afectar, ni por las curvas, todo lo relacionado con el Plan Nacional de Desarrollo, uno de los ejes del Gobierno de cara a sus acciones de transformación prometidas en campaña.
Añadió que "ojalá no nos toque llegar a aplazar decisiones no prioritarias en la inversión pública del país”.