El presidente de Rusia, Vladímir Putin, insistió, este domingo, en que el problema de la nuclearización de Corea del Norte debe resolverse exclusivamente por la vía diplomática, después del sexto ensayo nuclear del régimen de Pyongyang.
En una conversación telefónica con el líder japonés, Shinzo Abe, Putin afirmó que “la comunidad internacional no debe dejarse llevar por las emociones”, y subrayó que “la solución integral del problema nuclear en la península coreana solo puede lograrse por medios político-diplomáticos”, informó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
“Los líderes condenaron el nuevo ensayo nuclear, viola las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y las normas del derecho internacional”, agregó el portavoz del presidente ruso.Moscú, aseguró Peskov, tiene más motivos de preocupación que muchos ante el desarrollo del armamento nuclear por el régimen de Kim Jong-un, “porque mientras que Estados Unidos se encuentra a miles de kilómetros de la península de Corea, lo que allí sucede tiene lugar en una inmediata cercanía a las fronteras de Rusia”. Putin y Abe acordaron seguir sus conversaciones sobre el problema de Corea del Norte en el encuentro que mantendrán el próximo jueves en Vladivostok, en el marco del Foro Económico de Oriente que acogerá esa ciudad rusa. Por otro lado, Putin y el presidente chino, Xi Jinping, “subrayaron la importancia de evitar el caos en la península coreana”, al tiempo que se reafirmaron en que es “absolutamente intolerable la nuclearización” de las dos Coreas, en la reunión que mantuvieron en la isla china de Xiamen que acoge la cumbre de líderes de los países BRICS.
Los dos mandatarios acordaron “coordinar sus acciones” en la arena internacional en este y otros asuntos, agregó Peskov.El portavoz del Kremlin insistió en que las sanciones adoptadas hasta ahora en la ONU contra Pyongyang
“No han dado ningún efecto positivo”.Los medios oficiales norcoreanos anunciaron que la bomba de hidrógeno que ha probado hoy el país con “total éxito” puede ser instalada en uno de sus misiles balísticos intercontinentales (ICBM), lo que, de confirmarse, supondría un peligroso avance armamentístico para el régimen de Kim Jong-un. Corea del Norte había llevado a cabo cinco ensayos nucleares hasta la fecha, de los cuales los dos últimos tuvieron lugar en enero y septiembre de 2016. La potencia de la detonación detectada hoy por los organismos sismológicos de Corea del Sur, Japón y China, así como por la Organización del Tratado de Prohibición Total de Pruebas Nucleares (CTBTO, en sus siglas en inglés), indica que se trató de un ensayo mucho más potente que los cinco anteriores.