Está en Japón. Es un templo construido en 1678 para recibir cualquier tipo de plegaria de los residentes de Soja, pueblo pequeño de Okayama. A finales del siglo XVII los residentes encontraron un sauce conocido como ‘llorón’ porque el tronco segrega líquido lechoso. Notaron que lloraba más de la cuenta y las mujeres acudían al lugar para solicitar fertilidad y buena producción de leche materna. Desde ese momento es un lugar de culto para los senos. Los feligreses colocan motivos de la parte femenina en las paredes como símbolo de agradecimiento.
