El pasado 18 de octubre el proyecto de presupuesto nacional para la vigencia 2018 fue aprobado por el Congreso de la República. En total, el próximo año tendrá a su disposición exactamente $235,6 billones.
Para poder llegar a esta cifra, el pleno del ejecutivo, en cabeza del ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, se reunió durante varios meses sumando y restando, quitando y poniendo números de aquí y de allí.
Según lo dijo el jefe de la cartera económica, el presupuesto para el 2018 fortalecerá algunos programas sociales como lo son educación y vivienda; para poder lograrlo algunas entidades tuvieron un recorte, una de ellas fue el Fondo Nacional del Ahorro (FNA), una de las más sostenibles del Estado.
Durante el trámite del proyecto en el Congreso, diferentes voces de especialistas en el área manifestaron sus preocupaciones.
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Por ejemplo, Augusto Posada, exdirector del FNA, dijo que este recorte es la manera como “le quieren meter mano al ahorro de los colombianos”. Según él, se descapitalizará al Fondo Nacional del Ahorro, lo que supone un riesgo para el ahorro de los colombianos, de quienes lo hacen por medio de sus cesantías y de quienes ahorran voluntariamente.
José Roberto Acosta, miembro de Justicia Tributaria, también criticó en su momento el recorte presupuestal al FNA y al respecto dijo también que esto abre la puerta para que se haga lo mismo con otras entidades, convirtiéndolas en “la caja menor del Gobierno”.
Diferentes analistas indicaron que hacer esto no es buen mensaje porque debe primar la protección del patrimonio público y al descapitalizar entidades como esta se les quita capacidad competitiva, lo que terminaría en una sub-privatización.
Frente a estas críticas, el ministro Mauricio Cárdenas argumentó que la descapitalización al FNA no pone en peligro los dineros de las cesantías y los ahorros de los colombianos inscritos en la entidad, porque “están totalmente respaldados con los activos de la entidad”, que suman cerca de 8 billones de pesos.
El patrimonio del Fondo en el que millones de colombianos guardan sus cesantías y ahorros para acceder al sueño, por ejemplo, de vivienda propia es de 2.4 billones de pesos y con el recorte queda en 2 billones, según Cárdenas, “suficiente para seguir operando”.
Para la Contraloría General de la Nación, la Ley de Presupuesto General, que recortará $400 mil millones al FNA sería inconstitucional porque viola el artículo 48, que expresa textualmente que: “No se podrán destinar ni utilizar los recursos de las instituciones de la Seguridad Social para fines diferentes a ella”.
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El parágrafo del artículo 4º de la Ley 432 de 1998, expresa que “por ser el Fondo Nacional de Ahorro una entidad de seguridad social, no se podrán destinar ni utilizar sus recursos, utilidades y rendimientos o excedentes financieros para fines distintos a su objeto y funciones”.
Para la Contraloría, “la Ley 432 de 1998 no considera que los recursos del Fondo puedan destinarse a otros fines aún en el evento en que no se afectan las cesantías y los ahorros de los afiliados, pues no se trata de una norma potestativa en la cual el operador tenga la libertad de valorar los efectos de su decisión. Por el contrario, se trata de una prohibición categórica que no admite interpretación”.
La pregunta que hoy se hacen los colombianos de a pie que han visto, leído o escuchado la noticia, es si sus ahorros y sus sueños de tener vivienda propia están en la cuerda floja o no.
Al parecer la entidad tiene la fuerza para solventarse con la reducción que pretende el Gobierno y que ya fue aprobada por las plenarias de Senado y Cámara de Representantes, pero las dudas y las denuncias están en el ambiente y más grave aún, que sería una movida inconstitucional por salirse de la Carta Magna.
