El gerente del Hospital Universitario de Santander (HUS), Julian Niño, anunció el colapso de la sala de urgencias. Indicó que se acercaron más de 200 pacientes y el espacio solo cuenta con 90 camas.
Debido a la cantidad de personas, en la entrada de la sala de urgencias, se observan pacientes canalizados, sentados en sillas plásticas, sillas de ruedas y hasta camillas de ambulancias por la falta de disponibilidad de camas.
Igualmente, en la sala de espera y en el área de triage hay pacientes hospitalizados. La historia clínica y sus nombres se encuentran pegados en las paredes de los pasillos, además, los espacios de los ascensores también se convirtieron en pequeñas salas de urgencias.
Una de las razones sería porque, según el Gerente del HUS, varias EPS que operan en Santander no tienen red de servicios.
“Hay cierre de dos servicios de urgencias en el área metropolitana, que son los de la Clínica Bucaramanga y Clínica Chicamocha. Esta última precisamente anunció que va a restringir urgencias a algunas EPS”.
Asimismo, también se pronunció el secretario de Salud de Santander, Luis Alejandro Rivero Osorio, y manifestó que el problema continuará mientras las EPS no contraten una red prestadora de servicios para sus afiliados.
“Las EPS se quedaron sin red porque ninguna clínica les está contratando, por problemas como el incumplimiento de pagos”, expresó el secretario.
Agregó que la clínica Chicamocha dejará de recibir a pacientes de Medimás, Asmet Salud, Nueva EPS, Coomeva, Saludvida, Comparta, Soat, entre otros.
Según el funcionario, otro de los factores que están generando el colapso, es por el alto número de ciudadanos venezolanos.
“Cada días se dispara la atención de migrantes que solo son atendidos en la red pública. Es un problema nacional”.
