Publicado por: christian.sandoval el Mar, 19/07/2022 - 06:59
Más de 30 presos se habrían fugado de una estación de Policía en Cali. Las autoridades esperan recapturarlos próximamente.

Cali amaneció este martes con la noticia de una fuga masiva de presos en la estación de Policía La Flora, al norte de la ciudad. Todo habría sucedido en medio de un descuido de los guardias, aprovechado por al menos 36 privados de la libertad que en cuestión de segundos salieron corriendo y lograron evadir la persecución de los uniformados. 

De acuerdo con la información preliminar, hasta el momento dos de los presos que huyeron habrían sido recapturados en medio del plan candado que las autoridades iniciaron desde el momento uno de la fuga. En medio de ello, esperan aumentar el número de capturados en las próximas horas. 

Los presos que volvieron a manos de las autoridades habrían sido encontrados caminando por la carretera, aunque se desconoce los rumbos específicos y escondites del resto. 

Los fugados son, en su mayoría, sindicados por hurto y tráfico de estupefacientes, que precisamente se encontraban detenidos en la Estación de la Flora por el fuerte hacinamiento que se vive en las cárceles de Cali y el Valle en general. 

De hecho, en esta misma celda donde se produjo la fuga de presos también había un hacinamiento superior al 400%, al tener 84 presos en una instalación pensada para 15

Lo cierto es que esta situación en las cárceles del país, específicamente en las del Valle, es una bomba de tiempo que sigue creciendo. Precisamente, hace un mes se dio el lamentable suceso del intento de fuga e  incendio en la Cárcel de Tuluá, que terminó con la muerte de 52 privados de la libertad. En su momento el INPEC también confirmó  30 personas con quemaduras graves. 

Al parecer, la tragedia comenzó con una riña que degeneró en un motín, en el cual algunos presos prendieron fuego a sus colchones y aunque los bomberos de Tuluá llegaron rápidamente para controlar el fuego, muchas de las víctimas murieron por inhalación de humo. 

Esta situación en las cárceles fue reconocida por el presidente electo, Gustavo Petro, quien en su momento señaló: “El estado colombiano ha mirado la cárcel como un espacio de venganza y no de rehabilitación. Lo acontecido en Tuluá, como la masacre en la Modelo, obliga a un replanteamiento completo de la política carcelaria de cara a la humanización de la cárcel y la dignificación del preso”.