Dos años de trabajo y más de 1.700 organizaciones sociales y campesinas le dieron vida a la Marcha Patriótica, que se llevó a cabo este lunes en Bogotá. El viernes 20 de abril estos grupos realizaron una última reunión en la sede de la Iglesia Misión Carismática Internacional G-12, en Bogotá, para ultimar detalles. Sabían que no podían dar pasos en falso. Debían lograr que más de 15.000 personas llegaran a Bogotá para hacerse sentir en torno a un tema importante, que muchos les causa escozor: un diálogo con los actores en conflicto.
Durante el fin de semana las organizaciones que se unieron para este objetivo eligieron los 25 representantes en el territorio nacional, quienes harían eco de esta nueva figura en todo el país. Se trata de grupos de izquierda distintos al Polo Democrático que buscan un espacio para hablar de paz y política.
Si bien la persona más visible es la ex senadora Piedad Córdoba, detrás del movimiento están David Flórez, de la Federación Estudiantes Universitarios; Andrés Gil, líder de la Asociación Campesina del Valle del río Cimitarra; Carlos Lozano, director del periódico Voz, Hernando Gómez y Mauricio Ramos.
Aún no se ha hecho pública la forma de financiación de este movimiento, pero se sabe que su capacidad económica es muy fuerte, tanto, que logró trasladar a la capital 10 mil personas desde diferentes municipios de Colombia.
Un integrante de la organización le contó a Kien&Ke que algunos grupos de la izquierda de otros países contribuyeron con los gastos para la logística de la marcha. Se destaca la presencia del Partido Comunista Cubano, que ha direccionado recursos económicos y canalizando ayudas provenientes de diferentes partes del mundo.
¿Podrá convertirse la Marcha Patriótica en un partido político? El tema está en la agenda aunque hasta ahora solo se habla de paz y una salida negociada al conflicto. Sin embargo, muchos creen este movimiento crecerá y será tan influyente como la desaparecida Unión Patriótica.
