El debate sobre la construcción del metro subterráneo o elevado de Bogotá ha generado gran controversia entre diferentes mandatarios políticos y ciudadanos. Por su parte, la alcaldesa Claudia López respaldó, en un reciente debate, la petición del presidente Gustavo Petro de subterranizar una parte de la primera línea de este sistema, la cual haría parte de la avenida Caracas.
En esta reunión, la mandataria se refirió al senador David Luna afirmando que la solicitud del jefe de Estado no es un simple capricho, sino que es una demanda "responsable y rigurosa", puesto que Petro tendría los conocimientos necesarios para saber qué le conviene más a la ciudad.
"El presidente Petro, que por fortuna fue alcalde de Bogotá, está haciendo una solicitud responsable y rigurosa, si fuera caprichosa senador Luna, lo que él lleva en su corazón es su proyecto, el que él diseño con mucho esfuerzo, que estaría construido hoy de no ser por la mezquindad política de quienes hablan hoy de construir sobre lo construido", argumentó la alcaldesa.
De la misma manera, López hizo acotación a una reciente encuesta que se realizó en la ciudad, en la que se le preguntó a mil habitantes si preferían que el metro se construyera de la misma forma como ha estado establecido, con el tramo hasta la calle 72 elevado, o si desearían que se cambiaran los planes y que esta parte se hiciera subterránea.
Ante esto, el 77 % de los usuarios aseguraron que preferían que las obras continuaran como están planteadas actualmente y el 23% restante manifestaron que les gustaría que este tramo se hiciera subterráneo, así tarde un poco más en construirse. Los resultados fueron interpretados por la alcaldesa como una "señal" que debía tenerse en cuenta.
Sin embargo, el presidente ha recibido constantes críticas por su petición, tanto por parte de otros mandatarios o como de ciudadanos, puesto que los cambios podrían necesitar más tiempo e implicarían un mayor costo para el patrimonio distrital.
Los ajustes que pidió Gustavo Petro para el Metro de Bogotá
La alcaldesa Claudia López presentó públicamente un balance de la reunión que tuvo con el presidente Gustavo Petro sobre las modificaciones y avances de la construcción de metro de Bogotá.
En cuanto a la línea 1 del metro, el jefe de Estado se reunió con el consorcio chino encargado de la construcción y con la interventoría. Mediante esta junta, solicitó que se hiciera una cotización de los costos que cubrirían eventualidades técnicas y jurídicas para hacer subterráneo el tramo de la avenida Caracas.
"El contrato se mantiene, la primera línea se mantiene, la financiación se mantiene, pero el presidente ha pedido que se explore la posibilidad técnica y jurídica de subterranizar el tramo de la Caracas, bien sea total o parcialmente", argumentó la mandataria.
Ante esto, el consorcio chino expresó, mediante el embajador chino en Colombia, que se atenderán las solicitudes de Petro y que el próximo 8 de enero se entregarán los estudios financieros, técnicos y jurídicos para la subterranización junto con el diseño definitivo de la primera línea.
Con respecto al proyecto de la calle 13, la mandataria enfatizó que el Gobierno Nacional y el Ministerio de Transporte "prefieren que se haga con el operador público de transporte La Rolita, y sus buses eléctricos, y no como una concesión del sistema tradicional de TransMilenio", al igual que el Regiotram de Occidente.
En cuanto a este último proyecto, el presidente pidió que se llevara a su máxima capacidad posible y pudiera cobijar a una gran cantidad de usuarios. De esta forma, se implementaron cinco cambios para el Regiotram de Occidente: Ampliación de capacidad, integración con el sistema de transporte de Bogotá, espacios amplios en sus estaciones, facilidad de trayectos y prevención de que haya competencia desleal entre estos operadores regionales y locales que se intersectan.
Por último, la alcaldesa también se refirió al Aeropuerto Internacional El Dorado y afirmó que el flujo de personas que se está movilizando hoy en día es el que se presupuestaba para el año 2040, por lo que sus instalaciones deberán ser expandidas.
Para llevar a cabo este proyecto, el Ministerio de Transporte y el Gobierno Nacional ya están realizado los respectivos estudios y una consultoría que determinará como se optimizará el espacio del Aeropuerto. Además, se analiza la posibilidad de unir estas obras con la nueva red de transporte que facilite la llegada de los usuarios a El Dorado.
