El próximo 25 de enero iniciará el calendario escolar en Bogotá, que por orden de la Alcaldía Distrital, deberá realizarse por medio de clases virtuales, una situación que preocupa a los dueños de papelerías y comerciantes del sector que no tendrán la tradicional compra de útiles que representa gran parte de sus ingresos al iniciar el año.
La situación de este sector se empeoró debido a que, según indicó Fenalco Bogotá, los dueños de papelerías y comerciantes de útiles escolares desplegaron toda la cadena de suministro, luego de los anuncios de la Alcaldía a final de año que anunciaba el retorno a las aulas.
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Sin embargo, por el segundo pico de la pandemia que se desató en el mes de enero, la administración distrital suspendió el inicio de la educación presencial en los colegios oficiales y públicos y solicitó continuar con las clases virtuales.
Esa decisión sometió al sector de la papelería en Bogotá a un inventario que no va a ser vendido en las próximas semanas, y una contratación que no se podrá efectuar, según Fenalco, lo que sumiría a los comerciantes en pérdidas de más del 40% y la eliminación de al menos 10 mil empleos. El gremio aseguró que las afectaciones son por:
- Inventarios: el sector adquirió gran número de productos que evidentemente no van a tener salida. Adicionalmente, dado que el año pasado tampoco hubo mucha rotación de inventario, por el tiempo de almacenamiento los productos se vuelven obsoletos y en muchos casos se dañan y esto impacta económica y ambientalmente porque son productos que pierden su vida útil y se deben eliminar.
- Contratación: A la fecha se había realizado cerca del 50% de la contratación temporal para impulso, mercadeo, logística y producción que recibieron entrenamiento en cada línea de negocio, así como en temas de bioseguridad, pero la situación actual obligo a cancelar más del 80% de dicho personal. Además las empresas deben asumir los costos como los asociados al plan de entrenamiento y la dotación que se les entrega, sin que se vayan a utilizar.
“Las temporadas escolares representan para las compañías del sector el 80% de sus ventas anuales, además generaban alrededor de 13 mil empleos temporales en Bogotá de los cuales el 40% se convertían en empleos permanentes. Con la actual situación vamos dos temporadas escolares perdidas, ahondando en el desempleo no solo en el sector comercio sino en toda la cadena de producción y distribución, se calcula que se perderán cerca de 10 mil empleos”, señaló Juan Esteban Orrego, director de Fenalco en Bogotá y Cundinamarca.
El líder gremial indicó que, además, las ventas por la jornada escolar podrían caer en un 40% y un 60% a falta de una temporada de compras mayoristas de útiles escolares. Así mismo, señaló que el 50% de los mayoristas distribuyen a las papelerías de barrio, las cuales no van a adquirir elementos por la cancelación de clases presenciales, a lo que suma el cierre de este tipo de negocios que son considerados no esenciales durante las cuarentenas de la capital y toques de queda.
FENALCO ha solicitado a través de diferentes canales que se elimine la restricción a los establecimientos comerciales catalogados por el Distrito como no esenciales. Recordando que la ley (artículo 1° de la Ley 7° de 1943) es clara en decir que “se entiende como artículos de primera necesidad los víveres, drogas y mercancías de ordinario consumo entre las clases populares” y ese concepto es el que deber quedar en los decretos.
Justamente este jueves, tanto en Bogotá como en otras ciudades, cientos de comerciantes de los sectores considerados como no esenciales en las medidas restrictivas, protestaron para solicitar que se permita la apertura de los comercios, para evitar más cierres como los que se han visto a causa del confinamiento.
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El director de Fenalco Bogotá Juan Esteban Orrego, indicó que en la ciudad se presentaron cierres de al menos 58 mil establecimientos comerciales, una situación que se podría incrementar a causa de que, en su concepto, la reactivación no ha comenzado en la capital del país.
