La angustia y la esperanza se entrelazan en las palabras de María Claudia Tarazona, esposa del senador Miguel Uribe Turbay, quien este lunes 16 de junio hizo un emotivo llamado a los colombianos en medio del crítico estado de salud de su esposo, tras haber sido sometido a dos intervenciones neuroquirúrgicas de urgencia en menos de 48 horas.
“Hoy con el corazón en la mano tengo que decirles que está librando la batalla más difícil que habíamos transitado hasta el día de hoy. Por eso salgo para pedirle a cada uno de los colombianos, apelando a su buen corazón, por el amor que sienten por mi familia, por Miguel, por Colombia, que hagamos una oración masiva. El día de hoy es crucial”, expresó entre lágrimas Tarazona, en un video que rápidamente se viralizó en redes sociales.
Estado de salud: crítico pero estable
El parte médico más reciente, emitido por la Fundación Santa Fe de Bogotá, indica que Uribe permanece internado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) especializada en neurología, con monitoreo continuo y estado hemodinámicamente estable. Sin embargo, el pronóstico neurológico sigue siendo reservado.
La segunda cirugía, realizada esta mañana, fue consecuencia de una hemorragia súbita que se presentó luego de la intervención inicial del domingo, cuando el político fue operado de emergencia tras un sangrado intracerebral agudo. Según los médicos, las próximas horas son decisivas en su evolución.
Un atentado que conmocionó a Colombia
El deterioro de salud de Miguel Uribe se produjo tras el atentado que sufrió el pasado sábado 7 de junio, durante un acto público en el sur de Bogotá. Aunque las autoridades no han dado detalles concluyentes sobre los responsables, el ataque representó un golpe directo a la campaña del precandidato presidencial del partido Centro Democrático.
Uribe, de 39 años, ha sido una figura clave en el uribismo, conocido por su firme postura en defensa del orden público, la seguridad y la institucionalidad. Su hospitalización ha generado una ola de solidaridad que ha trascendido ideologías, con pronunciamientos de líderes de todos los sectores políticos.
Reacciones y apoyo desde todos los rincones del país
La petición de María Claudia Tarazona no pasó desapercibida. Desde primeras horas de la tarde, hashtags como #FuerzaMiguelUribe y #OraciónPorMiguel se volvieron tendencia en X (antes Twitter). Figuras como Álvaro Uribe Vélez, Paloma Valencia, Federico Gutiérrez y la propia bancada del Pacto Histórico enviaron mensajes de aliento, coincidiendo en la necesidad de preservar la vida y el respeto por la democracia.
“Hoy no hay colores políticos, solo el deseo de ver a Miguel recuperado”, escribió la senadora Angélica Lozano. Por su parte, el expresidente Uribe señaló que "la vida de Miguel es una luz para este país que tanto necesita líderes valientes y honestos".
La salud de Uribe, tema de interés nacional
La evolución de Miguel Uribe Turbay no solo mantiene en vilo a su familia, sino a toda una nación. Las decisiones médicas que se tomen en las próximas horas serán claves para determinar el alcance de las secuelas y su eventual recuperación. Mientras tanto, su equipo de campaña ha suspendido todas las actividades programadas, concentrando esfuerzos en acompañar a la familia y mantener informada a la opinión pública.
El impacto del atentado y la gravedad del estado del senador han reavivado el debate sobre la seguridad de los líderes políticos en Colombia, en especial durante temporadas preelectorales. A pesar de los esfuerzos institucionales, el país sigue siendo un terreno peligroso para quienes ejercen liderazgo público.
Una súplica desde el corazón
El mensaje de María Claudia Tarazona es, ante todo, una súplica nacida del amor y la desesperación. Su llamado a una oración masiva ha calado en el corazón de miles de colombianos que, desde iglesias, hogares y redes sociales, han comenzado cadenas de oración por la recuperación del senador.
Mientras los médicos luchan por preservar su vida, el país entero se une en un solo clamor: que Miguel Uribe Turbay supere esta dura prueba y regrese al lado de su familia y su patria.
La esperanza sigue viva.
