Gilberto Rodríguez Orejuela, el exjefe de la organización criminal del Cartel de Cali falleció mientras se encontraba recluido en una cárcel de Estados Unidos donde cumplía una pena de 30 años por delitos de narcotráfico, terrorismo y homicidio.
Rodríguez Orejuela tenía 83 años de edad y se encontraba preso desde diciembre del 2004 en el país norteamericano. Posteriormente a su extradición sufrió un infarto y tras los años de reclusión tuvo varios quebrantos de salud donde padeció cáncer de colon, de próstata, hipertensión, gota y trastornos psiquiátricos.
El exjefe del Cartel de Cali estaba recluido en la cárcel federal de Butner, en Carolina del Norte tras ser señalado de diferentes delitos relacionados con el narcotráfico.
Cabe recordar que Rodríguez Orejuela fue uno de los grandes capos del narcotráfico en los años 80 y 90, donde su poderío en varias zonas del país dejaron como saldo una ola de violencia durante ese periodo de tiempo donde se disputaron las rutas del narcotráfico con el Cartel de Medellín.
El exjefe del Cartel de Cali fue uno de los grandes contrincantes de Pablo Escobar con quien desató una guerra por el poder del narcotráfico, la exportación y producción de la cocaína que era enviada a varias naciones en operativos ilegales organizados por los cabecillas de las estructuras delincuenciales.
Tras el operativo donde Pablo Escobar fue abatido en una acción conjunta entre la Policía Nacional y el Ejército, el jefe del cartel de Cali se convirtió en el hombre más buscado del país por los delitos de terrorismo y narcotráfico, así mismo, era requerido por la justicia norteamericana por los mismos señalamientos.
En un operativo de las autoridades Rodríguez Orejuela fue capturado el 9 de junio de 1995 por El Bloque de Búsqueda, quienes dieron con el paradero del delincuente en una caleta de una de las propiedades del capo en la ciudad de Cali, Valle del Cauca.
En las primeras declaraciones, se conoció que el exjefe del Cartel de Cali habría fallecido por problemas cardíacos este miércoles 1 de junio mientras se encontraba recluido en la cárcel de Carolina del Norte.
