La Defensoría del Pueblo de Colombia pidió este martes a la guerrilla Ejército de Liberación Nacional (ELN) que dé a conocer cuántas personas tiene secuestradas y pidió "devolverlos sanos y salvos".
De acuerdo con la Defensoría, a través del trabajo de sus funcionarios, en 2023 alrededor de 110 personas fueron reportados como secuestradas en Colombia y otras 12 personas lo han sido en 2024. De estas doce, siete de ellas fueron retenidas en Arauca, fronterizo con Venezuela, y tienen como presuntos responsables al ELN y a disidentes de las FARC.
El Gobierno colombiano y el ELN anunciaron al borde de la medianoche en La Habana un acuerdo para prorrogar seis meses más el actual cese al fuego bilateral, nacional y temporal, que está vigente desde el 3 de agosto.
El acuerdo destaca que el ELN también se compromete a "suspender de manera unilateral y temporal las retenciones de carácter económico", una decisión inédita de la guerrilla.
"En el desarrollo de la prórroga del cese al fuego, le reiteramos al ELN la imperiosa necesidad de que informe el número de personas que tiene en su poder", dijo el defensor del Pueblo, Carlos Camargo, citado en un comunicado de su despacho.
Camargo insistió en que la entidad dispone de los canales humanitarios y la capacidad institucional para brindar el acompañamiento necesario que permita el regreso de quienes están en cautiverio.
"La Defensoría del Pueblo (...) seguirá adelantando el monitoreo que constitucionalmente le corresponde, para verificar que los derechos de las comunidades no se vean vulnerados en el marco de lo acordado en la mesa de negociaciones, de cara a la extensión de 180 días del cese al fuego", agregó.
Por otro lado, Camargo consideró clave que el Frente de Guerra Oriental del ELN, que delinque en el departamento de Arauca, y el Frente de Guerra Occidental, con injerencia en Chocó, fronterizo con Panamá, se incorporen a las negociaciones de paz, a pesar de que la guerrilla dice que todos sus frentes acatan órdenes del Comando Central y están sentados en la mesa.
Esto para "evitar que, ante una posible finalización de la lucha armada por parte del ELN, esos dos frentes no sean la génesis de futuras disidencias, lo que tendría como consecuencia nefasta el prolongamiento del conflicto armado en los dos departamentos".
