
El informe de Oxfam Colombia llamado 'ECONUESTRA' sobre la desigualdad es un llamado urgente para afrontar una realidad que afecta a millones de colombianos: las disparidades económicas, sociales y territoriales que perpetúan la pobreza y la exclusión.
Kienyke.com conversó con Sandra Mojica, directora de influencia de Oxfam Colombia sobre la brecha de desigualdad que enfrenta Colombia. Oxfam revela que Colombia es el cuarto país con mayor desigualdad en América Latina, una región que, en términos generales, enfrenta enormes desafíos en cuanto a la distribución de la riqueza.
La concentración de la riqueza en el 1%
Una de las cifras más alarmantes del informe es la enorme brecha entre el 1% de la población más rica y el 50% más pobre.
Aproximadamente 375.000 personas en Colombia, que constituyen el 1% de la población, concentran un 33% de la riqueza generada en el país. En contraste, la mitad de los colombianos más pobres reciben solo el 4% de esa misma riqueza.
Esta diferencia en la distribución de los recursos no es solo una cuestión de números, sino de acceso a derechos básicos como la educación, la salud y la vivienda, que deberían ser garantías universales para todos los ciudadanos.
Desigualdad de género y étnica
La brecha de desigualdad en Colombia no solo se mide en términos económicos, sino que también está marcada por profundas desigualdades de género y étnicas. Oxfam señala que las mujeres, especialmente las indígenas y afrodescendientes, son las más afectadas por esta disparidad.
Las mujeres rurales, que ya enfrentan la exclusión social y económica, están en la base de esta pirámide desigual, recibiendo menos recursos y oportunidades que sus homólogos masculinos. Este fenómeno refleja una intersección de factores que perpetúan la marginalización de estos grupos, no solo en términos de riqueza, sino también en el acceso a la justicia, el empleo y los servicios públicos.
La justicia tributaria como solución
Desde Oxfam Colombia se hace un llamado a una reforma tributaria progresiva que permita una redistribución más justa de la riqueza generada en el país. En este sentido, se denuncia que el actual sistema tributario beneficia desproporcionadamente a las grandes empresas y a los sectores más ricos.
Por ejemplo, una persona que recibe un salario mínimo paga más impuestos en proporción a sus ingresos que las 37.000 personas más ricas del país.
Esta es una contradicción que Oxfam califica como "injusta", pues quienes más tienen deberían ser los que más aporten al sostenimiento del Estado.
Una de las principales propuestas de Oxfam es revisar los beneficios tributarios que actualmente reciben las grandes empresas. Estas empresas, en su mayoría grandes monopolios, disfrutan de exenciones fiscales que, según Oxfam, deberían reducirse a la mitad. El objetivo es aumentar la recaudación del Estado sin afectar a las pequeñas y medianas empresas, que son fundamentales para la economía y el empleo en el país. La revisión de estos beneficios permitiría al Estado recaudar más recursos para financiar políticas públicas que reduzcan la desigualdad.
Combatiendo la fuga de capitales
Otro de los problemas identificados por Oxfam es la fuga de capitales a paraísos fiscales, donde las grandes fortunas colombianas y las empresas transnacionales esconden sus recursos para evitar el pago de impuestos. Oxfam propone la creación de un impuesto sobre la riqueza extraterritorial, que grave los recursos que se encuentran fuera del país sin declarar.
Este impuesto, que afectaría a aquellos que trasladan su capital al extranjero, podría ayudar a reducir las pérdidas fiscales derivadas de la evasión tributaria.
En paralelo, se hace un llamado a fortalecer el trabajo internacional para combatir los paraísos fiscales. Oxfam destaca la importancia de la colaboración entre países latinoamericanos para lograr un sistema fiscal global más justo.
Esta cooperación podría mejorar las condiciones fiscales de la región y asegurar que las grandes fortunas paguen impuestos de manera equitativa.
Redistribución para un futuro más justo
Más allá de la recaudación, Oxfam enfatiza la necesidad de que los recursos obtenidos mediante una reforma tributaria sean utilizados para mejorar las condiciones de vida de los más vulnerables. Para ello, propone destinar parte de esos fondos a programas de salud, educación y protección social, así como a la implementación de un Sistema Nacional de Cuidado que favorezca a las mujeres y a las personas en situación de vulnerabilidad. La educación, en particular, es uno de los pilares sobre los cuales se debe cimentar la equidad social, ya que el acceso a una educación de calidad es un derecho que está directamente relacionado con las oportunidades laborales y el bienestar a largo plazo.
Asimismo, Oxfam destaca que el Estado debe crear mecanismos que permitan mitigar los impactos del cambio climático, un fenómeno que afecta de manera desproporcionada a las poblaciones más pobres y vulnerables, muchas de las cuales habitan en zonas rurales del país. La transición energética justa es otro de los aspectos clave en este proceso, pues el acceso a energías limpias y sostenibles es fundamental para reducir las desigualdades económicas y sociales.
El llamado a la acción
El informe de Oxfam no solo se centra en la crítica, sino que también presenta propuestas concretas que podrían transformar el panorama de desigualdad en Colombia. Para cerrar estas brechas, el informe hace un llamado a la sociedad civil, al Estado y a los candidatos a cargos públicos a comprometerse con la creación de políticas que promuevan una redistribución equitativa de la riqueza y una justicia tributaria más efectiva. Oxfam recuerda que la solución a estas desigualdades no solo depende de las políticas gubernamentales, sino de la participación activa de la ciudadanía.
En este sentido, Oxfam insiste en la necesidad de que todos los colombianos comprendan la importancia de la reforma tributaria y se involucren en la exigibilidad de sus derechos. No se trata solo de una cuestión de expertos en economía, sino de una lucha colectiva por una Colombia más justa e igualitaria. Como bien señala el informe, "esto no es un tema que nos afecta solo a unos pocos, sino a todos".
El informe de Oxfam Colombia sobre la desigualdad es un llamado urgente a enfrentar las disparidades que afectan al país. A través de una serie de propuestas concretas, Oxfam aboga por una reforma tributaria progresiva que permita redistribuir la riqueza y reducir las desigualdades económicas y sociales. Sin embargo, el éxito de estas propuestas depende de la voluntad política, la colaboración internacional y, sobre todo, del compromiso de la ciudadanía. Solo a través de una acción conjunta, que incluya tanto a las instituciones como a la sociedad civil, será posible avanzar hacia un futuro más justo para todos.